domingo, 12 de diciembre de 2021

Nuevos lugares

 

Los nuevos lugares siempre me
han traído mucha emoción, más que emoción, a veces es la adrenalina de conocer, darse el chance de sentir ese nervio de estar entre otras personas, y como tal, siempre trato de estar abierto (máaaaaaas???) a que puede ser un gusto o una decepción.

Como tal, el buscar el lugar, que desde hace mucho tiempo tenía ganas de conocer, por pláticas, por twits, y pues para que tardar más, así que me lancé al chikro, dicen que cada quien cuenta cómo le va en la feria, y pues yo tenía ganas de conocer todas las atracciones.

La primera vez, aclaro, fue un poco decepcionante, fui un miércoles, pero no me tocó nada memorable, demasiados twinks, y a estas alturas del partido, no estoy en el punto de ponerme a competir con un cuerpo joven y firme, mi público es otro, así que de no ser por dos más o menos honrosas cogidas, no hubo más allá.

Pero la revancha se acercó, y aprovechando que estaban anunciando un viernes de osos, me lancé para ver qué tal se ponía.

Tengo que darle el mérito al lugar, limpio, personal por demás amable, buen pedo, los chicos de la barra son un acierto total, todo perfecto, todos le echan un chingo de ganas para que te la pases a gusto, y aunque ya cambié mi dinámica de conocer amigos, el corresponder una sonrisa no ha dejado pobre a nadie.

Incluso, me he encontrado bastantes cuates que asistían a Marne, todos en su onda, el saludo, el preguntar cómo nos va y así, la mayoría ya sabemos a lo que vamos, el tiempo dl té y las galletas lo dejamos para después.

Ese día me tocó un buffet bastante diverso, los infaltables twinks, pero también mucho oso, gorditos, maduros, leathers, a gusto el asunto, así que tras realizar mí ya consabido ritual de cerveza y cigarro, me dejé llevar por la curiosidad, el lugar con varias muchas modificaciones para bien, más espacios para ver y dejarse ver, algunos que nadie ocupa, o no por lo menos como yo me lo imaginaba, pero lo importante es que se puede dar rienda suelta a todos los bajos, medianos y deliciosos instintos animales que todos traemos dentro.

Me quedé mirando a un chaval, que se cogía un oso grandote sobre una de las mesas, luciendo un gag en la boca, diciendo que no con la cabeza mientras se la metían entera en su culo que lo contradecía pidiendo más.

Al irme internando en el lugar, una mesa más en una área obscura y alcahueta, donde les daban verga a unos flacos sobre de ella, un barboncito ataviado con un arnés en el torso que le acomodaba sendas metidas a su víctima del momento, y algo que se me hizo un buen detalle, es que si te acercas de forma correcta, la gente no responde en mal plan, me tocó un beso, mi nalgada y la promesa de que en un rato seguía yo, así que dejé que el barbón disfrutara a gusto, y al pasarme al siguiente espacio, más personas gozando, hincados, en las bancas, cogiendo o mamando delicioso, hasta que me topé con unas manos ansiosas que primero me rozaron las nalgas, sin más me detuve ahí, el cuate, fan del faje, rico, besaba muy bien, sin más me bajó el bóxer, y yo el de él, al querer bajarme a mamar, me detuvo, el solo fajaba, no puse peros, lo dejé estrujarme rico, hasta que alguien se unió a nosotros colocándose detrás de mí, y como si lo hubiera adivinado, me comenzó a besar el cuello, mientras me restregaba su verga entre las nalgas, para mi sorpresa, era un chavo delgado con algo de vello en el pecho quién me aplicaba el castigo de Drácula deleitándose con mi cuello, y entre cada mordida me metía más la verga entre las piernas, tras besarme varias veces, me volteó para hacerme bajar a su verga, quise buscar la aprobación del primer cuate, pero ya estaba también besando a alguien más, así que a jugar se ha dicho, así que tal como lo sentí, tenía una verga deliciosa, grandecita y firme, el punto importante es que nos gustamos, y eso era todo, se la mamé lo mejor que pude, me esmeré en meterme su verga rica hasta el fondo, regalándole el plus de lamerle los huevos enormes que poseía, haciéndolo temblar, hasta que llegó el momento de que se desocupó un espacio al fondo, y sin más me llevó hasta allá para sin decir nada, y con una brutalidad deliciosa, aventarme literal a la banca, dejándome de espaldas, me jaló hacia él, subió mis piernas a sus hombros, no sin antes bajarse por un momento a darme una lamida de culo descomunal, y tras el infaltable salivazo, dejarme ir su verga rica hasta el fondo, sin ternuras, solo cogerme, así, sin trámites,  mientras me pellizcaba los pezones, el cuate no iba por romance, iba a coger, y me estaba dando una cogida deliciosa, hasta que alguien se acercó a nosotros, y mientras lo besaba por un lado, a mí me propinaba las estocadas más ricas, duro y sabroso, hasta que alguien más que se había acercado, lo relevó en la acción, me la saca, y no más se mete entre mis piernas que lleva cruzadas a su pecho, esta vez un oso bajito, poseedor de una verga no tan grande, pero que compensaba el detalle con un grueso bastante sabroso, y aunque el flaquito estaba sabroso de tamaño, el osito la tenía mucho más gruesa que él, así que si, aunque parezca imposible, me dolió, solo esperó un momento para que mi culo se acostumbrara a su calibre y como el anterior, duro y tupido, mi cabeza pegando rico contra la pared, hasta que alguno más se las ingenió para acomodarse sobre la banca, ofreciéndome su verga, esta vez un twink, delgado, de buena y deliciosa herramienta, que sin más me dio a mamar, aprovechando los empujones que el osito me propinaba, y una que otra nalgada que me dejaba ir, gozando el apretón de culo que viene después de cada golpe, mientras del otro lado estaba un gordito grandote pajeándose mientras miraba el cogidón que me estaba dando el osito, caso raro, el osito no paró hasta que terminó, tras acabar y dejar caer mis piernas al piso, al flaquito también quiso probar, solo que el me levantó, y tras empinarme sobre la banca, me subió las piernas al borde, dejando mi culo expuesto, que por poco tiempo estuvo vacío, de la misma forma, me la dejó ir de golpe, ya más abierto, pero emanando el calor y la humedad propias de haber tenido dos vergas dentro, me abría más las nalgas para que me entrara toda hasta el fondo, dios de mi vida, como lo gocé!! gentes de formas diversas se acercaron a mi boca, yo estaba en plan más pronta que nada, así que me dejé llevar y mamé cada una de las vergas que me metieron a la boca, hasta que el flaquito también acabó dentro de mí, sosteniendo mi cadera hasta estar pegado por completo a él.

Tras terminar, me levanté para ponerme mi bóxer, al querer salir, me topé con el gordito grandote que se chaqueteaba mientras me cogían, al pasar junto a él, me detuvo, solo cruzamos miradas, en chinga se acercó a mí, me tomó de la mano, solo dijo, "ven", yo me dejé llevar por él, hasta una de las mesas de la entrada al pasillo, se detuvo justo ahí, besándome, mientras me abrazaba, después de lo que vio, ya fue más fácil dejar que me bajara el bóxer, y tras quitármelo, dejarme ir, primero un dedo y luego otro mientras me besaba, previo a la cogida que planeaba darme, se acercó más a la mesa empujándome con su cuerpo enorme y su pancita deliciosa, hasta que topé con la mesa, me senté ahí, y tras un momento, me levantó las piernas, -déjame limpiarme- le dije, solo respondió -así te quiero- y sin más, me acostó en la mesa, y tras abrir mis piernas, se bajó a lamerme el culo, que lamidas de culo me dio el cabrón!!, y perverso como me gustan!!, abriéndome el hoyo con los dedos lamia cada pliegue de mi culo adolorido, abriéndome más y más, mientras me estremecía por tener dos dedos de cada lado de mi culo, abriéndome lo más que podía, llevando su lengua magistral hasta el inicio de mis huevos, y tras llegar a mi verga, también dedicarme unas mamadas deliciosas, hasta que por fin, se levantó, y tras ponerme más saliva, meterme su verga que era la suma de los tres anteriores, dura, grande y gorda, solo que con el plus metérmela de poco a poco, como si gozara cada centímetro de mi túnel del amor, gozando con cada poco que me iba entrando, despacio, sin prisa, hasta que sentí su vello pegado a mí, ya habiéndolo metido todo, ahora si el mete y saca furioso, la gozosa sinfonía de dos cuerpos chocando, todo ese delicioso dolor de cada empujón, me tomó por los hombros empujándome cada vez más hacia él, hasta lograr que me medio acomodara para besarme, y con cada mordida de labios, me la dejaba ir más y más rico, un oso grandote que estaba mirando se acercó a detenerme una pierna, sin perder detalle de la cogida, y aunque traía el bóxer, se le notaba un bultote enorme, pero solo se limitó a ayudarle al gordito sosteniendo mi pierna mientras yo sentía las gotas de sudor que me dejaba caer en el pecho, hasta que por fin tras una mueca de placer, venirse también dentro de mí, y tras procurar dejarme hasta la última gota de mecos dentro, incorporarse dejándome admirar su casi 1.90, unos hombros anchos y una pancita bañada en sudor, pero aún no terminaba, así que sin decirme nada, me saca su verga, y ahí va de nuevo a lamerme el culo, lamiendo sus propios mecos, chupándome el culo, el oso, sin dejar de sostener mi pierna, se acomodó tras de él, tomándome las dos piernas, dejando que me lamiera todo, gozándome rico, para ese momento, yo estaba volando literal, de dolor, de placer y gozando la lengua de este cabrón.

Para cuando terminó, el oso me soltó, y tras darle una palmada, se fue hacia el fondo del cuarto contiguo, el gordito se levantó, me dio mi bóxer, y después de darme un beso rico que sabía a mecos y sudor, me ayudó a levantarme, y se fue exhibiendo su vergota medio parada mientras se iba hacia el baño.

Me quedé por un momento ahí sentado, procesando el rato de placer que había tenido y tras un momento, me levanté e hice lo mismo, fui al baño para asearme un poco, pero el gordo no había dejado ni rastro de todo el jugo del amor que me habían dejado en el culo.

Fui hacia la barra por otra cerveza y un cigarro, que me fumé despacio, gozando el momento, y mientras mi culo dejara de doler un poco para lo que vendría después.

Tras un rato, me fui de nuevo al cuarto del fondo, ya había más gente, no me había percatado de otro cuarto nuevo que estaba también al fondo del pasillo, así que, audaz como soy, me metí, al entrar, la falta de luz me descontroló, tras acostumbrarme un poco , se podían distinguir las siluetas de varios, muchos entregados al placer, unos mamando, otros cogiendo rico, y al ir esquivando personas, la misma gente me llevó al fondo del cuarto, donde estaban varios osos cogiendo rico, y ahí, en el fondo, el osote que me había abierto de piernas, sin más, me acerqué a él, y de principio me esquivó, pero al darse cuenta que era yo, se colocó en el mismo sitio, me puse junto a él, solo se limitó a llevar mi mano a su verga, parada y enorme que comencé a acariciar sobre su bóxer, solo se acercó a mi oído para peguntar - si la aguantas?- claro!! respondí, así que se quitó el bóxer, dejándome ver su verga enooooorme, si señores, una verga de esas que se tienen pocas veces en la vida, sin perder tiempo me hizo ponerme en cuclillas para comenzar a mamar, era una de esas vergas que no caben en la boca, por lo ancho y lo largo, el cuate, como de 1.80, velludo de todos lados, me dejó mamarle la verga rico, mientras con la mano comenzaba a acariciar mi cabello despacio, hasta encontrar un mechón de donde jalarme, enredó sus dedos en mi cabello jalándome hacía atrás, y al quedar mirando hacia arriba, con la boca abierta, detenerme ahí, para escupirme, me gustó, así que lo dejé tratarme así, y entre escupitajos y jalones y uno que otro delicioso cachetadon, me metió la verga hasta el fondo, atragantándome, mientras me detenía por un momento con ambas manos para que no me zafara, ya con la verga parada en todo su esplendor, me bajó el bóxer, me lo quitó y se lo enredó en su muñeca, me aventó a una de las bancas, y tras empinarme, comenzar a nalguearme, el puto tenía unas pinches manotas, que uffffff!!! Así que lo esperé con las nalgas a su disposición, mientras con cada palmetazo, me hacía levantarme, hasta que se acercó de lleno a mí, y sin decir nada, se abrió paso en mi culo, empujándome su vergota dentro, me zafé por el dolor, quise levantarme, pero no me dejó, me hizo empinarme más, -ábrete el culo, me dijo- lo obedecí sin decir nada, - con las dos manos!!- dijo ahora, y así lo hice, solo sostenido por mi pecho y la cara en la banca recibiendo de nuevo ese animalote dentro, -estás bien mojadito cabrón- dijo, no le respondí, solo aguantaba su verga descomunal apretando los puños y con los ojos cerrados, recibiéndolo a gusto, -ábrete más!!, quiero que te entre toda cabrón!!- me dijo ahora, y así lo hice, -así te gusta carboncito??- decía, -te gusta mi vergota, putito?- -que rico culo tienes pinche gordito! -eso, así, apriétame fuerte cabrón, te vas a comer esta pinche vergota con tu culito goloso cabrón!! Yo gemía y me aguantaba el dolor lo más que podía, y mis gemidos lo prendían más, -mira que rico te la comes cabrón! te voy a dejar todo boquetón cabrón!! -dime que te gusta cabrón!!- dime cómo te gusta mi vergota rica papi!! para ese momento, neta que estaba llorando, el dolor era insoportable, pero el pinche oso enorme me estaba gozando, y peor lo que vino después, alguien se paraba frente a mí, metiéndome la verga a la boca para callar mis gemidos, el oso ni se inmutó, siguió cogiéndome, por lo que yo pensé que solo sería un momento, pero estaba bien pendejo, me metió la verga por casi 20 minutos, mientras el tipo que me había dado verga a mamar terminaba en mi cara, y uno más se acercara para terminarme también en la cara, hasta que el osote comenzó a bufar, previo a su inminente acabada, así que me la saca del culo, y se pone frente a mi terminándome en los labios, y si, era inevitable mamársela también, hasta que me dejó todos sus mecos que traté de no tragarme, no lo logré, con su verga hasta el fondo de la garganta no lo pude evitar, el cabrón temblaba, y yo junto con él.

Después de las cuatro cogidas, y con un tremendo dolor de culo, ya no me quedaron ganas de quedarme, así que me bajé para irme, al llegar a la barra, el osote se acercó a mí, y tras un - lo tenemos que repetir bebé!!- me dio su número escrito en un papel, y se fue tras guiñarme el ojo.

Les mencioné lo de la feria? esto fue como un pase vip a los mejores juegos!!

Enano perverrrrssso

Diciembre 2021

lunes, 26 de julio de 2021

Todo es cuestión de paciencia

 


Hasta hace unos años, aún no me resignaba a ser la segunda opción de nadie, pero en estos andares del sexo furtivo, a veces es necesario ir haciendo una coraza, que nos proteja de tantas cosas y a veces de tantas chingaderas que algunas resultan inimaginables.

Dicho esto se justifica que a veces me ha tocado ser "el sabor del mes", y a veces que nadie me pele, pero siempre está el factor paciencia, no soy el típico wey que se la pasa chupando como cosaco, como si el alcohol disminuyera los resentimientos y la falta de autoestima, siempre lo he dicho, el alcohol me desinhibe, me pone enjundioso, y por mis narices podrán pasar 200 cabrones o estar cogiendo felices de la vida, y nunca seré ese cabrón mala copa que se mete a huevo, o que quiere a huevo con alguien hasta llegar a fastidiar, tomen nota los necios, eso le caga a cualquiera!!

He sido testigo de ver cabrones tirados como trapo, pedisimos, weyes que solo tienen una pregunta "¿traes poppers?", chicos que van de uno en otro sin disfrutarlo siquiera, hasta de cuates a los que les están pegando un mega cogidón de miedo, sin que los tipos expresen absolutamente nada, meter-sacar y ya, sin más...¿dónde queda el disfrutar al tipo?...

Hace poco me pasó todo esto junto, el pedisimo, el de los poppers, cabrones que van de culo en culo por 2 minutos y parece que hicieron un favor, chavos con culos que cualquier mortal envidiaría, pero que se dejan coger sin más, sin disfrutar, sin expresión, hasta triste a veces el notar sus miradas vacías, solo siendo un depósito de mecos, llegar a estos límites me da miedo!!

Miedo de llegar a eso, a esos límites, a ser solo eso, un hoyo donde se descargue cualquier cabrón, por lo menos espero tener la satisfacción de una buena verga, de un amante creativo, y no caer ante el típico wey que solo me empine se venga y ya, sin más, tampoco quiero un romance, aclaro, pero por lo menos es un plus el sentirse atractivo para la otra persona, que así me dé un cogidón salvaje con cachetadas y nalgadas, le quede el gusto de tenerme, de disfrutarme, y de saber que si hay próxima vez, lo vamos a gozar muchísimo ambos.

A lo largo de mi camino en la putería, he coleccionado un sinfín de frases dichas por mis amantes, "me hice una chaqueta pensando en ti", "que rico culo tienes, gordito", "mira como me pones", "me acuerdo y se me para”, “me llevé el aroma de tu culo en los dedos, y me la jalé tres veces”, “le cambio a cualquiera mis 20 putitos por una noche sumergido en tu culo" etc... todas ellas en algún momento me hicieron temblar de gusto, y de excitación.

Hace poco, al visitar un lugar nuevo, me pasó que nadie quería conmigo, así, tal cual, -n-a-d-i-e , pero no me dediqué a chingar gente, solo los miraba coger, desfilar, posar, vi a uno que otro cuate que me había gustado cogerse a alguien más, pero tengo por regla dejar que disfruten, nada de "mío o de nadie"!!, y fue cuando se iba haciendo más tarde que el cabrón más vergon, que había repartido verga a diestra y siniestra durante la tarde se fijó en mí, mientras se dejaba cachondear por un tipo, me llamó hacía ellos, y al acercarme, el otro cuate lo quiso seguir fajoteando, es se dejó, volteando hacia mí para besarme, y besaba rico, al otro no le gustó el rumbo del juego, así que se quitó encabronado, dejándome con este cuate, alto, muy alto, me sacaba casi 20cm de altura, y así agachado hacia mí, siguió besándome mientras me jalaba hacia el por la cintura, me dejé morder el cuello, la nuca, lo dejé lamerme la espalda, y aunque él estaba totalmente desnudo, se esmeró en fajotearme de lo lindo, metió su mano dentro de mi bóxer para dejarme ir un dedo mientras me seguía besando, mientras un grupo de 6 o 7 cabrones nos miraban, lo miraban, el, guapo, de cabello quebrado recogido en una cola, velludo del pecho, algo flaco para mi gusto, pero que me estaba dando la fajoteada de la noche, hasta que alguno más de los que nos miraban se sentaba frente a nosotros, así que el flaco lo llamó de la misma forma que a mí, y él también se acercó, pero colocándose detrás mío, también desnudo, se pegó a mi espalda mientras me deslizaba rico su verga en las nalgas, yo me dediqué a besar el cuello del flaco y el a besarnos a ambos, primero uno y luego otro, hasta que me volteó hacia el anexado, y ahora era la verga del flaco, deslizándose por la raya de mis nalgas, que separó para ponérmela justo en medio, sin meterla, solo dejándome sentir esos más de 20 centímetros deliciosamente húmedos, dejándome mojado el camino hacía mi culo con su precum, mientras él seguía besando al nuevo, y así uno más se acercó por el otro lado, mientras yo ya me había empinado a mamar la verga del cuate frente a mí, y la uno más que se había acercado hasta que escuche  lo que tanto había deseado: "quieres que te demos?", peguntó el flaco, fue inevitable decir que no, así que poniéndose en cuclillas me bajó el bóxer de un tirón mientras se internaba en mis ingles, lamiendo rico y llevándose mi verga a la boca, yo me incorporé mientras sentía su boca y la verga ansiosa queriendo entrar en mí del primer cuate, y la insistencia del nuevo azotándome su verga en la cadera, el flaco no perdió más tiempo, y tras ponerme boca arriba en una mesa, solo se escupió la verga, mientras los otros tres nos rodeaban, esperando su turno, y como no quería que ninguno se fuera, volteaba mi cara hacía una y otra verga que tenía a los lados, que tampoco estaban nada despreciables, mamando rico, mientras el flaco sostenía mis piernas en alto, solo para que sin más me la metiera poco a poco, sacándola para ver como mi culo se abría al recibirlo, los de los costados me sujetaron cada uno una pierna, así que el flaco se recostó sobre mí, solo para meterla toda, aguantando con todo mientras le chupaba la verga a uno de ellos del lado derecho, y el flaco al del lado izquierdo, y así quedamos, el flaco cogiéndome y mamando verga y yo al que estaba del otro lado, solo sintiendo las embestidas cabronas que me propinaba, solo movía su cadera, mientras se escuchaba el rítmico "plas-plas" de mis nalgas chocando contra él, hasta que cambiamos de verga, ahora yo la de la derecha y el la de la izquierda, y uno más de mi lado, que se anexó al otro cuate abrazándolo y acercándome su verga, sin más me la sacó de la boca y me puso la del nuevo en la boca, ya con permiso, seguí mamando delicioso, hasta que el flaco me sacó la verga solo para cederle el turno al cuate al que se la mamaba, se bajó de la mesa, y cómo vas pinche gordito, una verga más de la misma forma, abierto de patas, cambiando de manos que me sostenían, y chingón porque el que me estaba cogiendo se empino a modo de que el flaco se la metiera, y así lo hizo, quedando un delicioso sándwich, musicalizado por mis gemidos y los del flaco, y las cachetadas leves que me daban los otros dos a los que les mamaba la verga, y otro más que se había subido al lugar que había dejado el que me estaba cogiendo, que no tardó tanto, dejándome su venida en el culo, y de nuevo el flaco al quitarse el que había terminado a cogerme, y también a mamar verga del nuevo, uno de los dos que tenia de mi lado, se puso tras el flaco, y él se dejó coger también, y de nuevo la cogedera, cada vez más duro, y el flaco chorreando sudor delicioso sobre mí, cogiéndome rico, hasta que quiso otro culo, así que le cedió su lugar en mi agujero al que se lo había cogido, un gordito moreno, alto, y poseedor de una vergota rica y gruesa, con la modalidad de que me pusieron empinado apoyado en la mesa, con la cara pegada a ella, y tras uno, dos, tres intentos de metérmela lo logró para hacerme soltar un quejido de dolor, pero no me dejaron zafarme, sintiendo las embestidas del torote que me cogía, mientras el flaco se ponía del lado derecho, para empinar al que se la mamaba, empinarlo de la misma forma y cogérselo rico, mientras yo sentía las manos de alguno que otro propinándome nalgadas y abriéndome lo más que se podía para recibir al cabronazo que me cogía, que estaba fascinado viéndome mamar y moverme de atrás hacia adelante, recorriendo por completo su verga, apretándolo cada vez más, y el dejándose ir tras un gruñido de placer que coronó con una nalgada dura, logrando que, según él, con ese último apretón se la dejara limpia, me quedé esperando la siguiente verga, y tal cual, uno más de los que se habían acercado a que se la mamara, tomó su turno en mi pobre culo adolorido, también de forma salvaje, duro, mucho muy duro, mientras yo no me podía quejar por seguir mamando, hasta que también terminó, y aunque este detalle me extrañó en el momento, me pude reconocer que me habían dejado para su gran final, al hacerse más tarde, y después de haber cogido durante la tarde, fui su último cabrón, el que se llevó lo mejor, durante esas más de dos horas, recibí por lo menos seis cabrones, sin contar los que me repitieron, entre ellos el flaco, que se daba su tiempo para coger o dejarse coger, para castigarme de nuevo, era inevitable no reconocer que los estábamos disfrutando, ambos gozándonos rico, y gozando a los cabrones que pasaban por nosotros, ya sea para coger o dejarse coger, y yo feliz ,repitiendo el numerito de mamarles la verga y que me la metieran, y hasta la lengua de un cabrón en mi culo recolectando todo el semen que me escurría entre las piernas, y tras una última lamida, también meterme su verga rica, que obviamente esperaba también terminar y al hacerlo, esperar para lamer su venida que había dejado sobre mis nalgas, hasta que por fin, de nuevo el flaco, que ya me acomodaba como se le pegaba la gana, empinado, en cuatro, piernas al hombro, y alguno que se había subido a la mesa para que se la mamara, solo para terminar en su boca, y el flaco en mi culo, metiéndomelo hasta el fondo, con unos golpazos deliciosos, y con el plus de que uno de ellos me la mamaba hasta que por fin terminé en su boca, apretando verga, culo y todo mi cuerpo, antes de sacarme la verga el flaco me hizo una última petición: "apriétame", y así lo hice, apreté mi culo lo más que pude, sintiendo como me la sacaba, y el ardor y el calor que mi culo emanaba después de tanta verga.

El flaco se fue, y también los otros, y me quedé por un momento sentado, recuperando el aliento, ya casi las 12, y como cenicienta, el sueño terminó, así que me fui hacia el baño para limpiarme, y ahí los vi, al pedo, al poppers, al que había cogido como conejo sentado y de jeta esperando, a los inalcanzables igual con cara de hastío, y pude pasar entre ellos, con esa sonrisa que deja el haber gozado tanto, y con la felicidad de haber sido paciente...

Enano perverrrssso

Julio 2021

domingo, 25 de julio de 2021

Saber es...coger


No es la primera vez que me pasa que me equivoco al momento de ligar, cuento con la muy bonita maldición de que el wey que a mí me gusta, yo no le provoco nada y después de andar rondando un poco por los pasillos del putero, beberme mis dos chelas de rigor, y fumarme un cigarro, ya con más confianza, vi desfilar a algunos cueros simpaticones, el más educado respondió la sonrisa, pero hasta ahí, los otros, o me hicieron jeta o me ignoraron, no sé por qué es a veces tan difícil el que a un gordo le guste otro gordo, pero bueno.

Después de un rato de refinarme por no sé qué maldita vez la película porno que estaba en la pantalla, decidí ir a darme la putivuelta al cuarto obscuro, si a alguno de ustedes mis lectores calenturientos le laten los flacos, de no mal ver, y realmente vergones chacalescos, este es su lugar, (el nombre....ese lo suelto al final) y también varios más también de buen cuerpo y proporciones antojables, pero esa no es mi línea, algunos, si no es que la mayoría, ya estaban entregados al placer, ya sea mamando o cogiendo rico, y el concierto de gemidos se antojaba para anexarse, pero de no ser el mamar una que otra verga, no pasaba de ahí.

Y ahí fue que lo vi, alto llenito, piernas largas, de gorra, sentado al fondo, solo mirando como yo la cogedera, y aunque me quedé por un rato, al levantarme, inevitablemente tenía que pasar frente a él, al pasar, sentí su mano en mis nalgas, levantó su cara para mirarme, no le dije que no, así que me tomó por el bóxer, y me jaló hacia él, yo pensé que como en otras tatas ocasiones, me iba a tocar el momento transformer, pero no, abrió las piernas, y se bajó el bóxer, dejando salir una nada despreciable verga, sus 19-20cm, recta y ya deliciosamente parada, se quedó sentado, y me hizo voltearme de espaldas a él, para darme como bienvenida un beso en la cadera, que fue bajando lento mientras me bajaba el calzón, me lo quitó y me lo entregó para ponérmelo de pulsera como de costumbre, al agacharme para liberarlo de mi pierna, aprovechó para lamer mis nalgas, y sin perder tiempo, así los dos, el sentado y yo de pie, empinarme frente a él, su cara quedaba justo a la altura de mi culo, abrió mis nalgas y comenzó a lamer como poseído, tenía una lengua riquísima, que de inmediato se apoderó de mi agujero, lamiendo rico, mordiendo sus pliegues, eso estaba tan rico que me agaché lo más que pude, sujetando mis tobillos mientras el jalaba los pelillos de mi culo con los dientes, y ya para continuar con la audacia de meter dos dedos a los lados de mi culo, abriéndolo para meter más la lengua, y dejarme ir una que otra nalgada salvaje, el wey tenía la mano pesadita, pero lo compensaba con las lamidas de culo que me estaba propinando, disfrutando como me estremecía, se acercaron uno que otro a mirar mientras se chaqueteaban, uno más aventado se puso frente a mí, ofreciéndome su verga, ni como preguntar, así que comencé a mamar, otro flaco obviamente, que me empujaba la verga hasta el fondo de la garganta mientras me jalaba el cabello y el grandote seguía mamando mi culo, se acercó uno más al flaco y después de acariciarlo, se lo llevó, así que su turno fue tomado por otro más, y yo?? feliz con la lengua y los dedos del grandote que chupaba para meterlos cada vez que lo hacía, y mamando verga de uno y otro que se habían acercado, y hasta dándome nalgadas de vez en vez de uno que otro, uno se quiso acercar a mi culo, mostrándome su verga erecta, pero el grandote no me soltó, así que se incorporó, me dio una nalgadita y yo pensé que ya había sido todo, pero estaba equivocado, se acercó a mi oído, agachado sobre mi espalda, y dejándome ir una primera estocada deliciosa, se acerca y me susurra, ¿quieres ir al privado? ni siquiera lo pensé, dije que sí, así que me saqué la verga que estaba mamando, me incorporé y así, tomó mi mano, y encuerados recorrimos el camino a los privados, con la suerte de encontrar uno de los grandes desocupado, esperó a que entrara y después de darme una sonora nalgada, se metió el, cerrando la puerta, sin más yo me empiné sobre la banca, esperando su verga rica, pero ahora era mi turno de mamar ese rico trozo de verga, así que se sentó con las piernas abiertas ante mí, y cómo vas chiquito, a mamar rico, me metí su verga hasta el fondo desde el comienzo, mientras se estremecía, subí y bajé rápidamente esa verga hermosa, lamiendo y dejándole sentir que yo también tenía una lengua prodigiosa, sacándome su verga de la boca para lamerla de arriba a abajo, hasta que llegué a sus huevotes, dos enormes huevos y un escroto que colgaba divinamente, y que me encargué de lamer por todos lados, mientras el sujetaba sus piernas abiertas dejándome gozarlo, eso lo prendió aún más, se recostó más a la orilla, mientras yo recorría con la lengua todo ese camino hasta su culo, abrí un poco sus nalgas, pero el entendió de inmediato, abriéndose las nalgas de par en par, ofreciéndome su culo, así que lo comencé a lamer, sintiendo como le temblaban las piernas, pero sin abusar, llevé mi lengua y mi boca de su culo a su verga, lamiendo en el camino sus huevotes hermosos, mientras el solo seguía repitiendo un "siiiiii, asiiiii" repetidamente, mientras yo me deleitaba ahora mordiéndole las inglés, lamiéndolas, ya para esto él tenía sus piernas abiertas sobre mis hombros, hasta que le concedí una más de mis habilidades, me saqué su verga de la boca, solo para lamer su enorme cabeza, lengüeteándola, girando mi lengua sobre ella, hasta que ya no pudo más, se incorporó, y lo vi en toda su magnificencia, alto, simpático, y con una verga deliciosa parada frente a mí, solo para decir " mira como me tienes"!!!, le sonreí y el hizo lo mismo, sin decir otra cosa más que “ponte en 4", lo obedecí, empinándome ante él, ofreciéndole mis nalgas, se puso en cuclillas y me regalo uno que otro chupetón de culo, solo para aprovechar su saliva y dejármela ir de una vez, una primera clavada de golpe y hasta el fondo, me quise quitar, pero no me dejó, me sujetó por la cadera para empujarme contra él, "solo deja que se acostumbre" me dijo sin dejar de moverse, sin sacarla, solo llevando su verga hasta el fondo de mí, una y otra y otra vez, recibiendo mis gemidos con gusto, me hizo subirme a la banca, empinado, con las piernas abiertas de espaldas a él, una vez más lamió mi culo, me metió un dedo, luego otro, separando mis nalgas, y abriendo mi hoyito para en chinga levantarse y meterme de nuevo la verga, el cabrón estaba súper prendido con el hecho de ver mi hoyo abrirse y cerrarse cuando me la sacaba, solo para de nuevo empujármela rico, y va de nuevo a mamarme el culo, más lengua y más verga, rico y de forma rápida, y ahora me hacía que me acostara en la banca boca arriba, abriendo mis piernas, y metiéndomela de nuevo sin piedad, cada vez más y más duro, sujetando mis hombros para meterla hasta dentro, hasta que me jaló más hacia él, así, acostado en la banca boca arriba, levantó mis piernas echándolas hasta atrás lo más que pudo, para que mi culo quedara expuesto y sin decir más de nuevo su lengua riquísima recorriéndome, ahora con el plus de mamarme también la verga, mordiendo ya más cabrón el culo, y aunque me estaba cansando un chingo por la posición, lo estaba gozando de manera inexplicable, me tenía ya casi con los tobillos pegados a mi cara, abierto de piernas, sintiendo su lengua, su verga y sus dedos en el culo, hasta que se levantó, solo para subir una de mis piernas a su hombro, y de nuevo abierto de patas, meterme la verga.

Después de un rato, al fin nos cansamos, pero él no estaba dispuesto a dejarme así, así que me propuso ir  a la parte de abajo, donde hay un columpio, bajamos, y después de ayudarme a subir, abrió mis piernas, agachado sobre mí, solo sentí su mano en mi culo, un dedo, dos, hasta llegar al cuatro, mientras los sacaba y metía rico, no puedo negar que me hubiera encantado que me fisteara, pero el wey tenía unas manotas enooooormes, y unos dedos largos, así que mejor me contuve, y así parado entre mis piernas, sacando sus dedos de mí para después lamerlos y metérmelos de nuevo dijo: "estás lubricando chingón, gordito!!!", señal de que me estaba encantando el cogidón que me estaba propinando, ya para cierto momento, me metió su verga de nuevo, deleitándose con la vista del ir y venir del columpio, dejando que me ensartara solo, dirigiendo el vaivén solo sujetando las cadenas que lo sostenían, y de vez en cuando, apretando el culo al tenerlo dentro, hasta que uno que otro curioso se acercó, mientras él me ofrecía, "¿le quieres dar?", uno dijo que no, otro más quería con el pero él no me liberó, y fue hasta el tercero que dijo que si, el, ya cansado, se quitó de mí, no sin antes propinarme otra deliciosa lamida de culo y un escupitajo en el culo para lubricarme aún más, el recién llegado lo aprovechó, un chaval en sus veintes, delgado, lleno de enjundia y de ansiedad, que solo me metió la verga de chingadazo, sin más, sin decir nada, para ese momento solo era cogerme y ya, el grandote se acercó a mi lado para que le mamara la verga, y así los hice, hasta que el chavo terminó, y este se aventó una más de sus mañas, sin dejarme levantarme para limpiarme, se acomodó entre mis piernas de nuevo, mientras el chaval se limpiaba, y me metió de nuevo la verga, para así batirme los mecos que me había dejado el chaval dentro, dándome verga duro y hasta el fondo, hasta que se acercó un curioso más, tras ponerse junto a nosotros mirando la cogida, de nuevo la pregunta "¿le quieres dar?", dijo que si, así que se quitó su bóxer, este nuevo ya un maduro poseedor de una verga no tan grande pero si más gorda que las de los anteriores, tras acomodarse entre mis piernas abiertas, me lo mete al primer intento, pero al estar más ancho, me hizo estremecer de dolor, y tras pasar ese primer empujón, también aprovechó el vaivén del columpio para metérmela toda y hasta el fondo, llevándome hacia el agarrándome por las caderas, empujándome su vergota rico, gozando mis gemidos mientras yo tenía la cara de lado mamando la verga de mi grandote, que me sonreía como poseso, disfrutando la vista del cogidón que me estaban propinando, esperando el momento justo a que el señor se viniera entre espasmos, hasta que me dejó hasta la última gota de semen en el culo, solo esperó a que se quitara para meterme su verga de nuevo, ya con dos leches en en el culo, que me estaba batiendo delicioso mientras yo sentía escurrir todo ese jugo de amor por mis nalgas, hasta que por fin se vino, dándome una última estocada con los ojos cerrados y sujetando las cadenas del columpio para que no me zafara, y para dejarme hasta el fondo sus mecos, y los de los dos anteriores...cuando por fin me soltó, me sacó su verga, ,llevó su mano a mi culo, me metió los dedos solo para llevarlos a su boca, lamiéndolos de forma pornográfica, y convidarme también poniéndomelos en la boca, los lamí, sin pensarlo, lamí los tres dedos con gusto, mirando cómo me sonreía.

Terminamos, y ya no lo volví a ver, cogí con uno o dos más, pero a él ya no lo volví a ver.

Solo espero que alguna vez lo podamos repetir.

Me cazó rico, me escogió, y me cogió aún más rico.

La pose para el antro, aquí, parando las nalgas y moviendo el culo que la casa pierde!!!

El lugar?? El Babylon, lo demás?? Investíguenlo!!! 

Enano perverrrsso

Abril 2021

 

 

 

 

   

 

 


domingo, 9 de mayo de 2021

En unos años...

 Esto que les cuento tiene poco, recién abiertos nuevamente los vapores y gimnasios en la CDMX, después de permanecer cerrados a causa de la pandemia de Covid, ya me urgía ir de nuevo a ver otros pitos y otros culos que no fueran los mios, después de la insoportable sequía de taco de ojo que duró más de un año, se me ocurrió la ideota de ir en sábado, para no perder la costumbre, lleno mi vapor general del los baños "Señorial", con su delicioso surtido rico de chacales, y he de confesar que aunque no son unos vapores en los que haya acción tan seguido, si han habido dos que tres oportunidades de echarse un free, pero hoy no era de esos dias.

Tras estar por un rato en el vapor turco, andaban por ahí dos que tres chavalones que sin dudar me refinaría, pero hubo algo que llamó mi atención, un escuincle en sus 10-12 años, con unas nalgas más que dedicadas a hacer felices a algún pedofilo, el crio, gordito, simpaticón, y con un cabuz, que era inevitable observar, yo, como algunos más, le dirigimos una que otra mirada fugaz, y eso resultó escabroso, por que según esto el lugar es frecuentado por mucho chacal, que aparte de declararse super-machos, son homofóbicos a morir.

En el vapor erámos cinco o seis los que estábamos disfrutando del vaporcito, y el escuincle, que le dedicaba demasiado tiempo a hacer flexiones, justo frente a un cuate que no dejaba de mirarlo, se me hizo raro, por que el chámaco estaba super entrado empinándose, a esa edad, creo que están más interesados en cualquier cosa, menos en el ejercicio, pero el chavito estaba super entrado, todos, yo incluido, le dedicamos una o dos miradas a su intento de ejercitarse, y sería que estaba gordito, por que estaba super nalgón, más de lo normal, y era eso lo que llamaba la atención, ya para cuando se abrió las nalgas como parte de su " inocencia" y su juego, me imaginé que ya tenía el camino conocido, y era frente el tipo que no dejaba de mirarlo, quien llevaba una mano nerviosa a su verga oculta bajo la toalla, fiel a mi principio de ver, pero no tocar, me hice wey, así como los demás que estábamos en el vapor, era demasiada tentación, así que como yo, varios nos dedicamos a otra cosa, sin prestarle más atención, hasta que entraron varios cuates, 3 o 4, uno de ellos le preguntó al chaval si ya se había bañado, el chavito respondió que si, pero siguió empinado, jugando a meter su cabeza entre sus piernas, lo que para el chavo era un "juego", ya comenzaba a ponerse creepy, hasta que uno de los monitos que habían entrado, se dió cuenta de la mano que el cuate de la toalla tenía bajo la misma, y el que resultó el hermano del chavito le reclamara a gritos que por que lo estaba observando, "es mi carnalito, culero!!, por que lo estás viendo??"...el cuate se salió en chinga y los otros tres monos tras de el, en un  intento de pegarle, así que el cuate mejor se fué, el hermano entró por el chavo y lo sacó del vapor ante la mirada atónita de los que estábamos ahí, y que nos quedamos por un momento en silencio.

Hasta que alguién de los presentes rompió el silencio incomodo para preguntarle a alguién más: "como viste la acción??"...tras una pausa, el otro le respondió: "no, po´s está cabrón...no sé quien esta peor, si el chavito, el wey o su carnal!!"...yo me quedé para escuchar las opiniones, uno más intervino: "yo sé que es un niño, pero que pinches mamadas son esas de que se está abriendo las nalgas para que el otro puto lo vea?"...!exacto, intervino uno más, por que eso ya era enseñar el culo, y se le estaba empinando al wey este, solo que no son ondas de este cabrón estarlo viendo!!"...y de nuevo intervino el primero: "yo solo sé que en unos años más, o en una de esas va a haber uno que si se lo coja...aunque esté morrito, eso es lo que quiere el pinche escuincle, ya anda muy despiertito pidiendo verga a gritos, y si sigue enseñando el culo así, no lo duden que va a pasar, se lo van a cojer, y bien rico!"...todos quedamos en silencio, y hasta ahí llegó la plática, todos seguimos como si nada hubiera pasado...yo, me reservé mi opinión, a fin de cuentas, todos le vimos el culo, todos estábamos atentos a sus nalgas, todos vimos la acción, y nadie hizo nada, pero a fin de cuentas, todos, le dedicamos una, dos o más miradas al chavo.

Y creo que me quedo con la opinión del último, yo también me di cuenta de como volaron las imaginaciones, y que más de uno penso más allá, y sé que también habemos los que somos y fuimos pervertidores de mayores, y creanme, somos los peores!! 

Enano Perverrrssso

Mayo 2021




domingo, 28 de febrero de 2021

Con ganas de mas parte 1


Con 14 añitos, el mundo es todo lo que me deseaba terminar, después de tener la prueba superada de la segunda vez, pienso que en algún se me cruzó un cable, porque me encontré en plena edad de la chaqueta disfrutando con recordar aquella vez, así que comencé  a cambiar de hábitos, pasé de la idea de autodestruirme a la de manejarlo de alguna manera, y que mejor manera que dándole vuelo a la hilacha??

En la secundaria, poco a poco fui descubriendo cómo funcionaba mi "gaydar", no era difícil entre tanta hormona puberta, descubrir cabrones mirando a otros, los jueguitos de andarse agarrando la cola entre compañeros, descubrir a los más grandes disfrazar de abuso su gusto por los más chavos, si en ese momento la putería hubiera tenido el auge de ahora, eso hubiera sido un gran cuarto obscuro para más de 30 cabrones, entre ellos, varios que me llamaban la atención, los más grandes, de verga y de edad, era un placer descubrir al más teto que en ese entonces mediría 1.80 pararse la verga y mostrarla sin pudor, según él, a las chavas, pero asegurándose de que los demás lo admiraran, por lo menos sobre el pantalón, aquello era un monstruo!!

En el transcurso de ese tiempo de secundaria, pasamos de la planta baja en el primer año, al segundo nivel en el segundo y así con el tercer año, al ser solo tres grupos, eran pocos los salones que se utilizaban, los demás eran laboratorios, almacenes, y en los extremos, los baños, los de los niños, al final del edificio, lúgubres como la chingada, solos en la mayoría de las veces, sucios como cualquier baño de escuela, y por lo general, siempre abandonados.

 

Ahí fue donde encontré mi pasión, y aunque tuve que hacer mis pruebas con ensayos y errores, el hecho de encontrar las horas perfectas, que eran después del descanso, porque ya habían comido y tomado refresco, era inevitable la visita al baño, las horas cercanas a las salida eran  las mejores, en una ocasión, al entrar, mientras orinaba, escuché unos gemidos silenciosos, un rítmico golpeteo que era indicador de gente cogiendo, al esperar, mientras me lavaba las manos, vi salir a uno de los chicos más grandes del sanitario, acomodándose el pantalón y su verga enorme aún erecta también, sudando a mares, mirarme, sonreírme, y salir sin lavarse, a los 30 segundos, a otro más de su mismo grupo, del mismo sanitario, era predecible imaginar que no se estaban pasando la tarea, el segundo ni siquiera me miró, rojo de vergüenza se salió en chinga.

Ya para ese momento iba yo por ese premio, era lindo ubicarlo, y solo saludarlo con un gesto, el solo sonreía, mientras yo iba haciendo camino para ser el siguiente en disfrutar esa verga deliciosa, porque muy en el fondo sabía que algún día me lo iba a echar.

Ya con ese incidente, se hicieron más constantes mis escapadas al baño, y ahí mismo encontré a varios compañeros, de los que solo disfrutaban el hecho de pararse la verga y dejar que alguien más los mirara, pero sin tocar, solo para verlos, chavos que se bajaban el pantalón para orinar, y que aún con la trusa, dejaban ver sus culillos pubertos, obviamente, yo no solo quería ver, así que un día de tantos, me tocó un compañero de otro grupo, con fama de matadito, yo había llegado unos minutos antes, me disponía a orinar en el mingitorio, en eso llegó el, después de ponerse junto a mí, teniendo un espacio de dos metros a ambos lados, se colocó justo al lado mío, se sacó la verga, y mientras orinábamos haciéndonos compañía, rozó mi codo, al voltear a verlo, me sonrió, al terminar de orinar, ninguno de los dos se movió de su lugar, y en el asunto de la sacudida de pis, se le paró, era la comprobación de que "después de cinco sacudidas, es chaqueta”, ya que se le había parado ,aún en su sitio, volvió a mirarme, esperando que yo diera el segundo paso, mientras yo no sabía qué hacer, ¿ y si se la agarraba y me ponía un putazo?, ¿ y si no le gustaba?, mi cabecita giraba a mil por hora, como esperando hacer algo con él, hasta que se hartó, se la acomodó y salió del baño, obvio, quedé como pendejo.

Mil veces me reproché mi estupidez, y repasé los mil setecientos hubiera, pero en ese preciso momento no supe que hacer, y pues, ni modo, ya habría otra ocasión, pensé.

Coincidí con algunos más en varias situaciones, hasta que en una de ellas, me tocó un gordito mejor conocido como "gigantón", tetazo, chistoso sin chiste, de esos gorditos muy blancos a los que se les forman chapitas rojas con el calor, muy alto para su edad, típico niñote que nomás no da una, pero poseedor de un cuerpo que me llamaba muchísimo la atención, recuerdo alguna vez que nos tocó hacer pareja en educación física, durante un ejercicio con ambos sentados con las piernas abiertas, se le rompió el short justo en la entrepierna, dejándome ver sus huevotes dentro del calzón, después de que solo dijera "se me salieron los huevos", muerto de la risa, no le dio importancia, pero yo quedé fascinado con lo que vi, unos huevazos enormes, y el bulto de su verga que aún dormida se antojaba enorme, después de esto, algún día por fin me tocó encontrarlo en el baño, cuando entré, dejó de hacerse la maravillosa chaqueta que se estaba haciendo en el mingitorio, no dudé, y me puse lo más cerca que pude a él, me pude dar cuenta del enorme animal que poseía, sujetándosela con la mano, aún quedaba libre un buen trozo, según él, seguía orinando, pero esperó a que lo viera, solo para decirme "dos manos, cabeza libre" muerto de la risa, yo lo miraba apendejado, no podía dejar de hacerlo, él se dio cuenta claramente, salí de mi estupor cuando sentí su mano en las nalgas, no le dije que no, lo dejé tocarme, acariciar mi trasero, sentir su mano sobre mi pantalón, y aunque torpemente, sabía lo que hacía, me acercó más hacia él, sin dejar de tocarme el culo, con la mano derecha se la comenzó a parar de nuevo, haciéndose una deliciosa chaqueta, "que bonitas nalguitas tienes" me dijo, no le respondí, pero tampoco me moví, "¿me dejas verlas?" fue lo siguiente, "y si nos cachan?" fue mi respuesta, no fue un no, fue un tal vez que a él le sonó a "!!ya chingué !!" , así que respondió enseguida "no pasa nada, casi no viene nadie", lo pensé por un momento, y volvió a insistir "qué? te da miedo??", le dije que sí, pero no me iba a pasar lo mismo que con el matado, no dije nada, me desabroché el pantalón y lo dejé caer a mis rodillas, para que se deleitara con mi trusa apretando mis jóvenes y deliciosas nalgas, sin dudarlo, se acercó más, igual acariciándome con una mano mientras con la otra se chaqueteaba, quiso bajarme el calzón, pero no lo dejé, así que se conformó con meter la mano dentro, sentía su mano recorrer mis nalgas, ver esa estúpida sonrisa en su rostro, esa mirada de placer, eran más que excitantes, yo también comencé a darme placer, y en un momento, me encontré haciéndole la chaqueta, su verga no cabía en mi mano, era un animal enorme, parado al cien, hasta que vino la siguiente petición, "me la mamas??", le dije que no, pero no se detuvo, "nomás tantito!!", de nuevo dije que no, pero de nuevo atacó, " chúpamela tantito, nomás métetela a la boca, me la chupas poquito y ya!!" para ese momento pudo más mi calentura, así que sin responderle, me puse de rodillas, solo le dije " nomás poquito!!", sin decir agua va, me metí su verga a la boca, ese sabor, ese aroma, esa saliva que había impregnado su verga al masturbarse eran...deliciosas, no me costó trabajo metérmela a la boca, para ser la primera vez que sucedía por mi gusto, era eso, me estaba gustando, ni siquiera duró tanto, pero el muy cabrón termino en mi boca, sin avisarme, hasta que sentí el líquido espeso y caliente en mi garganta, de principio hubo asco, pero dejé que terminara dentro, mientras me sujetaba la cara a su pubis, pude sentir ese temblor de sus piernas que fue aún más excitante, también terminé mientras el gozaba entre espasmos esa venidota en mi boca.

Después de esa vez, repetimos cada vez más seguido,  ya eran más las cosas que me pedía que hiciera, lamerle los huevos, juguetear mi culo con los dedos, mamármela el a mí, incluso una ocasión, al insistir un chingo de veces que lo dejara metérmela, pero sólo accedí a que terminara en mis nalgas, pero sin que la metiera, hasta que en una ocasión, ya estando súper caliente, me volvió a insistir en que me dejara coger, y de nuevo le dije que no, hasta que de nuevo insistió, pero con una tentadora variante, " si me dejas cogerte te doy 500 varos!!", solo le sonreí, y jugando le dije " dame mil y va!!", lo pensó por dos segundos, y después de un " órale wey, te doy los mil, pero me dejas terminar adentro!!", me le quedé viendo, solo para decirle -"de verdad me vas a dar los mil??", sin pensarlo, respondió, -!si, pero solo si termino dentro de ti!", lo pensé 10 segundos, el me gustaba y yo a él, tenía un pito más que sabroso, y pudo más mi calentura, así que le dije que sí, solo que le dije que no ahí, que mejor nos fuéramos a los baños de los talleres, que estaban más solos, porque ahí, aunque no era constante, de repente se aparecía uno que otro meón, ni lo pensamos, nos pusimos de acuerdo para salir al baño a la misma hora, para vernos y coger a gusto.

Esa hora previa a nuestra cita se me hizo eterna, por un momento pensé en no ir, en que tal vez no iba a pasar, o en que no me iba a gustar, tenía miedo de que pasara lo peor, pero fue más poderoso el instinto de tenerlo, o que se cogiera a alguien más si yo no iba, así que entrando al taller, después de un rato, pedí permiso para el baño, me lo dieron, salí en chinga, aunque muerto de miedo y excitación, al entrar, no lo vi, así que lo esperé por un momento, dediqué un momento para orinar, y fue la gloria cuando a través del espejo jodido y sucio lo distinguí, no dijo nada, solo se abalanzó sobre mí, se puso detrás mío , me tomo de la cintura y me acerco hacia su cuerpo, dejándome sentir su verga ya parada dentro del pantalón, restregándose en mis nalgas, -!pensé que no ibas a venir", le dije, a lo que solamente respondió -"y perderme estas nalguitas??, como crees!!- me tomó de la mano y nos metimos a uno de los sanitarios, apenas cerró la puerta, se desabrochó el pantalón, ambos nos bajamos los calzones, tome un momento para admirarlo y en chinga me fui a su verga, que mamé como nunca, ya sabía lo que le gustaba, así que lamí sus inmensos y enormes huevos de arriba a abajo, chupe su verga tanto que me encontré metiéndola por completo a mi boca, algo nuevo, porque no lo había podido hacer porque me ganaban las arcadas por el reflejo de sentirla en mi garganta, hasta que ya no hubo más, me levantó, y de nuevo me vi apoyando las manos en la caja del W.C., -me dejas meterte el dedo??- preguntó, le dije si, tras escupirse la mano, comenzó a hacer camino en mi culo, sentí esa primera metida de dedo con dolor, pero no me moví, dejé que me gozara tanto como yo, después de un suspiro, tome aire y después de que se acomodara, comenzó a intentar penetrarme, me puso saliva un chingo de veces, lo intentó otras tantas, pero nomás no lograba que me entrara, apenas y comenzaba a entrar, me quitaba por el dolor, sentía como temblaba todo mi ser, pero quise intentarlo una vez más, solo que me tenía lista una sorpresa, se puso de rodillas, abrió mis nalgas y comenzó a darme lengua en el culo, la primera vez que sentía una lengua en el hoyo, que cosa tan más deliciosa!!, que gusto!!, que placer!!, sentía riquísimo, sentía su lengua dejarle un espacio a un dedo que metía de poquito en poquito, tuvo que callar mis gemidos hasta que me controlé, porque eso era grandioso, hasta que no pude más, y fui yo el que le pidió que me la metiera, ni tardo ni perezoso, se acomodó de nuevo para intentarlo de nuevo, tanta lengua y tanto dedo cumplieron su cometido, y fue de lo más delicioso del mundo, ir sintiendo ese dolor, acompañado de su verga entrando en mí, sin ser brusco, moviéndose despacio, dejándome sentir cada centímetro de su sabroso animal, me dolía como la chingada, pero me aguanté, hasta que por fin logró meterla toda, en ningún momento fue brusco, al contrario, conforme la iba metiendo me preguntaba si estaba bien, paraba cuando notaba que me dolía mucho, y seguía metiéndomela sin prisa, despacio, tan rico que yo fui quien le pidió más, que me la metiera más duro, y así lo hizo, ese chocar de cuerpos, sus manotas en mi cintura empujándome hacia él, hasta que por fin, después de un rato terminó, sin sacármela, sentí como después de una última estocada se estremecía, y como temblaban sus piernas, tras un gruñido ahogado, se quedó con la cara en mi nuca, resoplando, repitiendo !puta madre, que rico!!" me la sacó, y yo sentí escurrir sus mocos en mis nalgas, -no te levantes!", me dijo, -límpiate primero porque si no te vas a manchar!", así lo hice, el sacó del bolsillo de su pantalón dos papeles, me dio uno y el otro con el que se limpió la verga, yo limpié mi culo que ardía con el otro, al incorporarme, me di cuenta de que me dolía, pero era rico, se sentía diferente, se salió del baño y se fue a lavar las manos y la verga, yo salí del W.C., para hacer lo mismo, para cuando terminamos, se acercó de nuevo a mí, me jaló por los bolsillos del pantalón, y me besó, no fue un beso de amor, o eso creo yo, solo fue por un instante, lo peor del caso es que hasta ese momento, nunca nadie me había besado, sentí su boca abierta sobre la mía, ese jugueteo de lenguas por 5 segundos, después del beso, se apartó de mí, me regaló una sonrisa  y se fue.

Me quedé un momento más, esperando que disminuyera mi temblor de piernas y el dolor de culo, al buscar otro papel en la bolsa de mi pantalón, me encontré con un billete de 1000 cuidadosamente doblado, lo miré y sonreí, el wey cumplió su palabra.

No tengo que explicarles que se nos hizo vicio, ya eran más seguido las cogidas con el grandote, y todas ellas acompañadas de dinero, hasta que en una ocasión, me preguntó si lo haría con uno de sus amigos, que igual me iba a dar una lana....ni lo pensé, le dije que sí, después de coger, me dijo que la próxima semana, su amigo me iba a esperar igual en el baño...

 

Continuará.

 

Enano Perverrrssso

Febrero 2021

 

 

 

 

 

 

   

 


lunes, 1 de febrero de 2021

Cuidado con lo que deseas...


Esto que les voy a relatar, forma parte de varias situaciones en mi vida, de las que no tuve control, hasta la fecha no he tenido la necesidad de establecer que hayan sido parte de algún problema, ni físico, ni mental, se los cuento por ser parte de mi existencia, por que como las experiencias buenas, las regulares y las malas también son parte de lo que me hizo ser como soy.

1986, Chavito, bastante teto, gordito, y sin más que ofrecer, desde muy temprano me di cuenta de mi gusto por los hombres, me gustaba verlos, algo me pasaba, era raro, pero me gustaba darme cuenta cuando alguien me miraba más allá de ver a un chavito, y desde esa edad comencé a desarrollar esa intuición para saber quien tenía un propósito más allá de algo inocente.

Cabe aclarar que hay un episodio más denso que aún estoy trabajando, y que tal vez más adelante les cuente, esto pasó después, y quiero aclarar que solo era yo consiente de mi gusto, pero que no sabía que era tener sexo con nadie. 

Esto que le cuento tendría lugar en mi tiempo de secundaria, 11 o 12 años, o sea que aún no había maldad en mi corazón, siempre la victima preferida de los abusivos, (si niños, desde siempre ha existido el bullyng!!) y había de todo, desde los que me chingaban por mis bobadas y cosas, pues todavía de niño, y a quien le fascinaba ir más allá, en estos últimos, un cabrón que siempre se la pasaba chingándome, el típico matoncito que nomás chinga y chinga, típico joderme con apodos, molestarme de todas las formas posibles, para el era su deporte favorito pasar junto a mi y darme un empujón o un zape, nunca llegó a pegarme, pero fueron un chingo de veces las que quise que se muriera, lo odié tanto, y para acabarla de chingar, mismo grupo y mismo taller.

El taller, recuerdo, era de una cosa que tenía que ver con trabajar con tornos y fabricación de piezas de metal, el taller era enorme, tenía dos bancas de trabajo largas, con las herramientas para trabajar, a los dos nos tocó del mismo lado, en la banca, junto a la pared, era un pinche infierno el haber terminado en la misma banca juntos, el wey se las ingeniaba para pasar a cada rato, y en el primer año, pasamos del empujón al "caballazo", pasaba y me aventaba con el cuerpo, o con un hombro, lo que se le ocurriera al pendejo este, en ese entonces solo lo tomé como ganas de chigar del tipo, nunca lo enfrenté, y aparte el wey tenía amigos igual de pinches mulas, y mi grupo de amigos y yo, éramos la pinche cobardía e inocencia con patas.

Obviamente, secundaria, creciendo, hormonas, pubertad...calentura!! una ocasión, recuerdo que me le quedé viendo sin que se diera cuenta cuando teníamos clase de educación física, el hecho de quitarnos el pantalón y quedar en short, era algo mágico para mí, y aunque el tipo no me agradaba, había algo en el que llamaba mi atención, en otra ocasión me bajó el short, sin lograr bajarme la trusa, me moría de verguenza, y el solo se burlaba de mi con dos de sus amigos, y para variar, no dije nada, me aguante mi coraje, alguna otra vez, igual a punto de bajar a la misma clase, nos quedamos al último, el, sus amigos y yo, recuerdo como al estarse cambiando, yo me quedaba en la baba mirándolos, veía sus piernas que ya comenzaban a cubrirse de vello, el era más alto que yo, espalda y hombros anchos, me sabía de memoria la anatomía de los tres, y tengo que reconocer que a mi el que me gustaba era el más bajito de los tres, pero yo seguía clavado literalmente mirándolos de reojo, chingándose unos a otros, hasta que a el se la aplicaron sus amigos, igual, jugando, entre los otros dos le bajaron el short, pero la sorpresa más grande vino cuando vi que también le habían bajado la trusa hasta los tobillos, no tenia como correr, quedando de frente a mi, me sorprendió lo que vi, un pene bastante generoso ya cubierto de vello obscuro, antes de que se cubriera con las manos, uno de sus amigos se dio cuenta de que lo estaba mirando y se lo dijo, el, desde donde estaba, me clavó una mirada de coraje, mientras los otros dos se salían muertos de la risa, nos quedamos ahí los dos, y en eso, el wey hizo algo que me comenzó a confundir, sin subirse la trusa,  se quedó parado frente a mi, se quitó las manos de ahí y sujetando su verga, la agitó, mostrándomela, mientras me decía: "¿que me ves, piche putito?", yo no dije nada, solo me levanté para salir del salón, pero me alcanzó a detener, me tomó por detrás, agarrándome por la cintura, y restregándome la verga en las nalgas, y se comenzó a mover como si me penetrara, mientras me decía: "¿ que, quieres que te coja puto?", "¿te gusta la verga verdad?"..como pude me zafé, y salí corriendo del salón, eso me sacó de onda cañón, pero de nuevo, no dije nada, y el tampoco.

Después de esa ocasión, hacía lo posible por no quedarme solo con el para nada, me apuraba lo más que podía para evitarlo, pero el buscaba siempre la forma de chingarme, cuando nos tocaba laboratorio, el tipo se sentaba frente a mi, y era su placer esperar a que lo mirara, abría las piernas y se agarraba el bulto de su verga mientras lo miraba, haciendo la mímica con los labios de "te voy a coger"!! yo me moría de miedo, le tenía terror, y aunque después de hacerlo el wey solo se reía de mi, no me podía sacar de la mente la imagen de lo que había visto, de sus piernas, de su verga que me parecía enorme, de la que tenía grabada en la mente todos sus detalles, su color, su largo, como tenía el prepucio, sus huevos grandes que comenzaban a verse peludos.

Y cada vez eran más constantes sus abusos, cuando nos tocaba taller, el wey se la pasaba pasando de un lado a otro de la banca, cuando pasaba detrás de mi, se me pegaba, o me agarraba las nalgas, o solo me rozaba, siempre discreto, pero con más frecuencia se acercaba junto a mi para susurrarme: "te voy a meter la verga", "te voy a coger pinche putito"... 

Hasta que en una ocasión, durante una clase en el taller, pedí permiso para ir al baño, para esto, la escuela era vieja como la chingada, los baños "buenos" estaban en el primer piso los de las niñas y en el segundo los de los niños, y hasta el tercer piso, había otros a los que nadie iba, del lado del taller, hasta el fondo del edificio, había otros que nadie usaba, por que estaban siempre asquerosos, y en ese entonces corrían las leyendas de que salían fantasmas y niños muertos, pero el único y verdadero espanto era que estaban asquerosos, como nadie los usaba, siempre los evitábamos, y por lo mismo, nunca los limpiaban, recuerdo que me andaba cabrón de hacer pis, y de plano ya no iba a llegar a los baños de arriba por más que corriera, así que después de que la maestra del taller me diera el permiso, salí en chinga, nunca me di cuenta de que mi acosador no estaba en el taller, y pronto sabría el por que.

Al entrar, hice el esfuerzo por no respirar el aroma fétido del baño, al abrir la primera puerta, lo que le sigue de asqueroso, la segunda, igual o peor, así que me fui hacía el mingitorio que apestaba a orines de 1920 y ya estábamos en el 86!! , ya se imaginarán, era más mi desesperación por orinar que voltear a ningún lado, cuando casi iba a terminar, volteo hacia la puerta abierta del último de los baños...ahí estaba mi bully, sentado en la taza, masturbándose a todo lo que daba, me quedé pasmado mirándolo, el, también se sacó de onda, pero siguió sin dejar de chaquetearse, mirándome también, me temblaron las piernas, así que me apresuré para salir,casi de inmediato se levantó e hizo lo mismo, termino, me subo el zipper y me giro para salir en chinga, pero de volada se paró frente a mi, interceptándome,-"¿ a dónde vas putito?"- cortándome el paso,  -"!!déjame salir por favor !!"- le digo mientras me tiembla la voz, tengo miedo, el me mira, tiene abierta la bragueta y del zipper abierto se asoma su verga que veo erecta y enorme, pretendo esquivarlo, y me detiene, una, otra y otra vez de un lado y del otro, me le voy encima, tratando de pegarle, ni siquiera lo logro, solo recibo un puñetazo en el estómago y otro en la cara,que me deja aturdido, aprovecha esto último, me toma del brazo, y me avienta dentro de uno de los baños, de nuevo intento salir, mientras el se mete y cierra la puerta, me voy hasta el fondo, a punto de soltarme a llorar, le pido de nuevo que me deje salir, en su cara solo una mueca rara, diabólica, perversa, y sus ojos con un brillo que me da escalofríos, le pido nuevamente que me deje salir, que voy a gritar, lo amenazo,  "-grita-", dice, "nadie viene para acá"... -"¿quieres salir?"-, le respondo que si, por que si no lo voy a acusar, -"¿y que wey?, yo les digo que me querías mamar la verga...a ver a quien le va peor!!", -"¿quieres salir?", me pregunta de nuevo, me desespero, mientras me sobo la cara por que me duele el puñetazo que me dió, -"ya te dije que si!!"- le grito desesperado, -"!!chúpamela!!- me ordena señalando su verga que sigue parada -"!!no wey, ya, por favor!!"- le grito de nuevo, mientras se acerca a mi solo para darme otro puñetazo en el estómago, me agacho por el dolor, mientras el me mira, -"si no me la chupas te voy a dar en la madre!!"-, -"!!no me importa, no quiero!!"- hace la finta de volver a soltarme un golpe, me cubro, tiemblo, tengo los puños cerrados, pero no reacciono, una, otra y otra vez hace lo mismo, el wey está disfrutando mi terror, así que comienzo a llorar, me aguanto, son lagrimas de coraje, de impotencia, mientras me arrincono más en el fondo del baño, -"ya wey, nomás chúpamela tantito!!"- vuelve a decirme, -no lo enfrento, no quiero que me siga pegando, lo miro con odio, y solo le digo -"¿y ya?, te la chupo y ya me dejas ir?"...el wey se saca de onda por un momento, pero reacciona, sonrie, ya me tiene donde quería....-"si, chupamela y ya te dejo ir!!"- -"pero no quiero, yo no..."- , cambia el tono y me habla más calmado, -"tantito, te la metes a la boca y ya!!"- -"¿seguro??"- le respondo, "!!si, seguro!!"- responde mientras se desabrocha el cinturón y se baja el pantalón y la trusa, lo veo, respiro entrecortado, de miedo, de excitación, -"pero ya no me pegues"- le digo-...-"!!ponte de rodillas!!"- grita, -"no, así", le respondo-, solo para que me diga: -"¿que?? quieres otro putazo??"-...espero pendejamente que cambie de opinión, pero se la comienza a parar frente a mi,... -"¿a que horas puto??"- me grita haciendo la finta de volver a pegarme, me cubro, lo pienso, me quedo parado, trago saliva, tengo la boca seca, tengo miedo, mientras me pongo de rodillas me tiemblan las piernas, estoy sudando, ya de rodillas, se acerca a mi, -"!!abre la boca!!", me dice, lo obedezco, lo espero con la boca abierta mientras me advierte: -"!!si me muerdes, o me haces algo, te rompo la madre!!", me dice de último, mientras se acerca a mi cara, cierro los ojos, me la mete a la boca, siento asco, me arqueo, me la saca y espera, mientras me ahogo y escupo, siento mis lagrimas caer en mis mejillas, -"!!abre la boca bien, cabrón, grande!!"- de nuevo trago saliva, tengo asco, pero lo obedezco, dejo que me la meta de nuevo, una vez, dos, -"!!pero chúpala cabrón!!"- me dice, así que cierro los labios, y se la comienzo a chupar, me muevo de atrás hacia adelante, mis labios apretando su verga lo hacen estremecer, siento como crece más dentro de mi boca, mi reacción es querer sacármela por el asco, la suya es detenerme, y jalarme por los cabellos, empujándome la cara hasta el fondo, me duele, y entre más quiero que la saque, el me jala más duro, así que me aguanto, aún con el asco que siento, se la chupo, mis brazos tiemblan a mis costados, me usa, mientras sigo llorando más, me suelta, pienso que ya se acabó, me levanto rápido, escupo al lado del retrete mientras se vuelve a masturbar, -"¿ya?", le digo, -"¿ya que?", me responde,- "!!bájate el pantalón!!"- me dice ahora...-"!!no, no me lo voy a bajar!!"- le grito ya con más miedo, -"tu me dijiste que te la chupara y ya!!, que más quieres??".... -"¿que quiero?...verte las nalgas!!"-...de nuevo nos quedamos en silencio, -"!!ya wey, tu dijiste que nomás te la chupara y ya me dejabas ir!!"- le vuelvo a decir...el sigue en su chaqueta, -"¿¿quieres que te rompa la madre, verdad??-...dejo pasar un minuto, no me va a dejar ir, así que derrotado, lo obedezco, me desabrocho el pantalón, y lo dejo caer a mis tobillos....mientras me observa, pero el hijo de puta quiere más... -"!!bájate los calzones!!", me ordena, -"solo déjame verte las nalgas mientras me vengo!"-lo miro, no se mueve de su lugar, así que lo hago, me bajo despacio la trusa mientras el me mira, -"!!volteate!!, me dice, tiemblo aún más cuando me grita, me sobresalto, estoy aterrado, espero que se canse, que solo sea una broma, pero eso no sucede..."!!que te voltees hijo de la chingada!!" grita de nuevo, humillado. lo hago, me volteo hacia la pared...pasa un momento sin decir nada, mientras me mira desnudo, se toma su tiempo hasta que me dice: "¿te acuerdas que te dije que te iba a coger, pinche gordo puto?"...no respondo, solo estoy esperando, sin moverme, al fin le gana la calentura, así que se avienta hacia mi, al hacerlo, por el empujón, mi cara pega en la pared, de nuevo quedo aturdido por el golpe, el deja ir sobre mi todo su peso, en ese momento, me desconecto, me bloqueo, mi mente se pierde, esto ya pasó antes, sólo repito -“noporfavornoporfavorno”!! ni siquiera se inmuta, me toma por la cintura y me pega hacia el, siento su verga parada en las nalgas queriendo entrar, opongo resistencia, le repito que no, y sigue sin detenerse y como me resisto, me toma de los cabellos y me azota la cara de nuevo en la pared, me mareo, escucho como se escupe en la mano, embarrándome torpemente el culo con la saliva, mientras con la otra me toma por el cuello, me quedo inmóvil, tiemblo más, vienen a mi cabeza cosas, esto ya pasó, regreso a mi realidad solo para escuchar como se lanza otro escupitajo en la mano, con el que se lubrica la verga, para después apoyar de nuevo todo su peso sobre mi, pegándome a la pared, mientras se sigue moviendo para penetrarme, lo intenta una, dos, tres veces, no lo consigue, por que aprieto lo más que puedo las piernas y las nalgas, digo que no por última vez, así que me da un puñetazo en las costillas, me doblo de dolor, y es cuando aprovecha que me empino para dejármela ir, no se decir si me entra toda, pero si lo suficiente para que me duela, el empujón me levanta, grito de dolor, pero de inmediato me tapa la boca con la mano, lloro, me duele, me duele mucho, pero no se detiene, me muevo hacia adelante y consigo zafarme, me vuelve a jalar del cabello, y me la mete de nuevo, hago lo mismo, y me la saco, se pega junto a mi, lo vuelve a intentar, pero no lo consigue,  ya no me penetra, así que solo me la pone entre las piernas que lo aprietan,se conforma con eso y se comienza a mover metiéndomela así, la mete y saca sin dejar de taparme la boca, quiero gritar, ni siquiera lo consigo, solo sigo llorando, por un momento y por alguna razón no pienso, solo siento coraje, siento como se mueve, como choca contra mi, hasta que comienza a gruñir, se mueve cada vez más y más rápido, después de un rato, gruñe más fuerte, hasta que por fin se detiene mientras siento algo caliente escurrirme por las piernas, no me suelta, se deja caer por completo, recargado sobre mi espalda siento sus espasmos, hasta que termina por completo, me la saca de las piernas, que sigo manteniendo juntas, lo ultimo que queda de semen en su mano, lo tira al piso con una sacudida, yo me quedo inmóvil con la cara pegada a la pared por un momento... -"!!Donde digas algo, te rompo tu madre!!...¿estamos? "- me dice mientras se sube la trusa y el pantalón yo sigo en el mismo lugar, termina, al voltear, me guiña un ojo, y me dice por último: -"ahorita te veo...P U T O !!"- se sale del baño, lo escucho salir, comienzo a llorar sin control, pero me quiero limpiar, quiero gritar, aunque tiemblo sin poder controlarme, busco en el piso del baño, pero no encuentro nada con que limpiarme, no consigo dejar de llorar, ni de temblar, después de pensarlo, me quito el pantalón, y me quito la trusa, es lo único que tengo para limpiarme como puedo, al limpiar de mi entrepierna el semen que me dejó, distingo un poco de sangre y de excremento, mis manos, todo mi cuerpo tiembla, me gana el asco, vomito, así que la tiro a la basura, después de que voy controlando me pongo el pantalón, me acomodo el uniforme, me lavo la cara con las tres gotas de agua que consiguen salir de un lavabo, me peino, o lo intento, siento como me duele la cola, me duele el costado, y tengo un fuerte dolor de cabeza por los jalones de cabello, cuando regreso al taller, al ocupar mi lugar, la maestra al verme pregunta: "¿¿que te pasó??”...me saco de onda, no se que decir...-"esteeee"...-"!!mira nomas que fregadazo traes!!", dice mientras me revisa la mejilla -" hasta ese momento me doy cuenta de que tengo un corte, ....”es que....me caí!!"- le digo , es lo único que se me ocurre y comienzo a llorar, la maestra me dice,- "!!vamos a la enfermería a que te revisen ese golpe!!, pues donde te caíste??"- le digo que en el baño, me cree, antes de salir, lo veo, me mira y poniéndose un dedo sobre los labios,me hace la seña de que no diga nada, ya en la enfermería, solo me ponen un trapo mojado en la mejilla y me dan aspirina, no preguntan más, y obvio, yo no digo nada...ni a mis amigos, ni a mis papás...ni a nadie...hasta hoy.

Nunca más volví a pisar ese baño, y el nunca se volvió a acercar a mi, consiguió lo que quería, se le hizo, me cogió y eso era lo que quería.

Quede mal, no dormía bien, no comía, me daba miedo entrar solo a cualquier sanitario, comencé a irme de pinta, a reprobar, aprendí a fumar, mis jefes lo atribuyeron a la adolescencia y todo eso me llevó a quedarme un año más por la cantidad de materias que no pasé, pero ese año, fue cuando al fin le di el chance a mi mentecita de superarlo..y de aprender a disfrutarlo.

Fue hace poco en un putero, escuchar la interacción entre dos cuates, chavillos, que al calor de la calentura, mientras cogían, uno pedirle al otro que lo violara...que lo rompiera...pobre idiota!!, lo que es no tener ni idea de lo que estaba diciendo, el wey no sabía ni remotamente lo que estaba deseando...estúpido!! 

Y con esta ya era la segunda, la primera luego se las cuento.

Enano perverrrssso

Febrero 2021


martes, 19 de enero de 2021

La que escoge, no coge...


 Mi adicción a los puteros me ha llevado a gozar de verdaderas aventuras, antes de llegar a los 30 la mayoría de las veces, mi peso me llevaba a cohibirme de una manera preocupante, tenía una especie de batalla eterna con mi autoestima, hasta que descubrí que eso no era problema y que había gusto para todo, con el tiempo, me fui quitando la idea de muchas pendejadas en las que yo mismo creía , o me dejaba arrastrar, buscar el príncipe azul, enamorarme de una cogida, de una verga, de una cara, de una cartera, dejarme humillar, pensar como mujer, andar con casados, tolerar mentiras y demás basura.

Llegué a los 40 con pareja, no lo puedo negar, soy feliz, pero eso es un asunto aparte, jamás luche contra mi adicción, al contrario, aprendí a sobrellevarla, a irme amoldando a que las cosas fluyeran, y acerca de mi peso, después de chingarme la deliciosa y pecadora cantidad de 28 cabrones en un día en una vacación a Puerto Vallarta, donde el numero total de cabrones en 5 días de vacaciones que visitaron mi trasero fue de 67 vergas sin contar los orales, y pesando la adorable cantidad de 125 kilitos, me hizo pensar en que estar gordo no era impedimento, ese solo estaba en mi cabecita pendeja.

Después de eso y por motivos de salud, tuve que bajar a 95 kilos, en los que me he mantenido desde hace casi 15 años, me desmotivó un poco, por que perdí amantes a la misma velocidad que bajé de peso, así que me tuve que acomodar a otros gustos, y así encontrarle el gusto a los maduros y a algunos flacos que aunque pasaban de mi por estar gordibueno, iba encontrando a quienes así les agradaba.

Esa tarde, me dejé llevar por mis ganas, y aunque en el putero en cuestión me había ido bastante bien, incluso con chavitos que buscaban un madurito que mamara rico y como siempre lo he dicho " a una buena mamada le corresponde una buena cogida", han sido pocas las veces que me he ido en blanco.

Llevo a cuestas la maldición de que al wey que me gusta yo no le gusto, y así sucedió,estuve largo rato tras de un gordito moreno y vergón que desde hacía tiempo se me había antojado, y fue hasta que nos topamos en el cuarto obscuro que se dio, estando yo dentro, el cuate se acercó a mi, sin dejar de tocarse la  verga sobre el calzón, yo pensé que como en tantas otras ocasiones el wey iba a pasar de largo, pero esta vez se quedó parado junto a mi, mientras yo miraba a dos flacos coger como conejos, y el calentón que venía con la vista, hasta que sentí su mano en las nalgas, dejé que me toqueteara rico, incluso que metiera la mano dentro de mi bóxer y me recorriera la raya con los dedos, se bajó un poco el frente de su truza, para dejarme ver su verga que tantas veces se me había antojado, el wey estaba bien firmes, así que no me moví de mi sitio, sin ser para nada sutil, solo me tomó por la nuca, llevándome a su verga, y pues, ¿a quien le dan pan que llore?, se la comencé a mamar como los grandes, deseando que el innegable servicio de mi lengua lo convenciera para que me la metiera.

El cabroncito, acostumbrado a ser el punto de atención y a que muchos estuvieran tras el, al fin me dio el chance de gozarlo, se la mamé de la única forma que sé que lo convencería, y el correspondió empujándome la cara hasta el fondo, hasta sentir su verga tocar mi garganta, acompañada de la arcada que viene después, pero el puto no me dejó apartarme, le encantaba como me la comía toda, dedicándome varios " que rico la mamas puto!!","cometela toda cabrón!!" y demás piropos que se prestan en ese momento, mientras se acercaban a nosotros dos o tres, rodeándonos, o mejor dicho, rodeándolo, unos tocándole el pecho, otro más aventado lo comenzó a besar, y el le correspondió el beso, mientras yo estaba de rodillas, sintiendo una que otra verga rozándome la espalda y los hombros, mientras el wey me tenía mamando sin dejar de quitarme la mano de la nuca, para que se la siguiera mamando.

 Al mirar hacia arriba, pude ver como se dejaba besar por uno y luego por otro a ambos lados de nosotros, y alcancé a notar a un señor alto, de espaldota ancha, blanco, sabroso, que sin quitarse el bóxer estaba parado junto a nosotros también, un señor maduro, peludito, barbón, en sus cincuentas, que solo nos miraba, o más bien, me miraba mamarle la verga al chavo, mientras ya otro lamía su pecho, y otro lo besaba, y se fue acercando al grupo poco a poco, para recibir un muy ojete aventón del tipo al querer tocarlo, y así uno tras otro lo fueron empujando de forma culera, sin conseguir que nadie se interesara por el, el don solo se hizo a un lado, no sin antes que dejara que le pasara mi mano por el bultazo que escondía bajo el bóxer.

Uno más se puso audaz, y me levantó, mientras el cuate no dejaba que apartara mi boca de su pito, que sin ser tan grande, estaba grueson, el que me levantó, me bajó el bóxer, y después de entregármelo, se pegó a mi por detrás, dejándome sentir su verga en las nalgas, para que el otro cuate se hiciera hacia atrás, separándome de los demás, y así acercarse a los sillones que están dentro del cuarto, el clásico movimiento que es preámbulo a la cogida.

Al fin me pude liberar de la verga del tipo y recuperar un poco el aliento, sin sutileza alguna, me aventó al sillón, para quedar empinado sobre el mueble, con las piernas separadas, esperando su verga, pero no lo hizo, dejó que uno de los chavillos que lo estaban besando lo siguiera cachondeando, mientras yo estaba empinado, viendo como le empezaba a agarrar las nalgas, y sin más se hizo a un lado y también lo colocó de la misma forma, quedando empinado el otro junto a mi, hasta que se lo comenzó a coger, por un momento y con el ego herido, pensé en levantarme y salir, digo, el cabrón se fue con el otro, así que ya no le iba a insistir, y mirando al don, al que nadíe le hacia caso, y estando a punto de levantarme, se acercó a mi, acariciándome la espalda, nunca me tocó las nalgas, solo pasaba su mano recorriendo mi espalda, algo en mi me hizo esperar, imaginando una recompensa que tal vez no iba a tener y mirando al wey al que se la mamé cogerse a otro más, el don se acercó todavía más a mi, y ahora si, dejando que sus dedos se pasearan por mi culo, se puso un poco de saliva en ellos y comenzó a meter un dedo juguetón, sin ser tosco, despacio y lento, hasta que ya fue inevitable que llevara mi mano a su entrepierna, para darme cuenta de que poseía una vergota larga y gruesa, así que me quedé empinado, mientras el se quitaba el bóxer, dejando escapar un animalote delicioso, se subió al mueble para quedar de frente a mi cara sobre el respaldo del sillón, sujetando su verga firme frente a mi cara, neta, escuche un "no mames, que pinche pitote del viejito!" y yo, sabiéndome ganador, no lo iba a dejar ir, así que ni siquiera lo pensé, y comencé a mamar verga, pocas han sido las veces que no me cabe una verga en la boca, y esta era una de ellas, una verga un poco curva, firme y gruesa, que me metí hasta el fondo, dejando que mi garganta y sus espasmos lo apretaran un poco más, llegando hasta sus vellos, sintiendo su pubis en mis labios, que el recibió con un quejido de placer, mientras recorría su pitote con mi lengua, girándola en todas direcciones gozando su verga, la lamí por completo, de arriba a abajo tomándola con la mano, hasta llegar a sus huevotes grandes y pesados, lamiendo, mordiendo el saco que los contenía, el don temblaba de placer, pero se dejaba hacer lo que yo quería, lamí esos huevos y esa verga por un ratote, mientras veía su verga en mi mano, y la enorme parte que no me cabía en ella, una cabeza grande y brillosa, lubricada por su mismo liquido delicioso, que yo lamía con gusto y placer, el don solo me preguntó: -¿la quieres?- ni siquiera lo pensé y le dije que si.

El don se incorporó, mientras yo seguía con las nalgas empinadas apoyado en el sillón, me hizo poner la cara en el asiento, y tal cual " face down, ass up", se puso en cuclillas para chupar mi culo, me dio un lavado de cazuela que yo mismo no habría superado, me dejó ir una lengua ancha y juguetona recorrer todo mi agujero, lamíendo cada pliegue que lo rodea, me lamió los huevos por detrás, dedicándome unas ligeras mordidas en la entrepierna que ya me estaban haciendo volar, no sin dejar de meterme un dedo en el hoyo, hurgándolo de manera deliciosa,  ya dilatado, se puso de pie, y ya que tenía ensalivado el culo por su lengua, me la metió, separó un poco más mis piernas para quedar justo a su altura, y así, me la comenzó a dejar ir, despacio, poco a poco, moviéndose despacito, sabiendo que el calibre de su verga no era para nada fácil, y sin poder negar que al entrar me dolió cabrón, pero me aguanté, y dejé que la fuera metiendo más y más, hasta que la tuve por fin hasta el fondo, pude escuchar un comentario: "y si le cabe al pinche gordo?", no hizo caso, ni yo tampoco, el esperó a que me acostumbrara, y ya que lo había logrado, se comenzó a mover más rápido, para esto, algunos mirones de los que estaban viendo al otro cabrón coger, ya nos rodeaban mirando como me cogía, abriéndome las nalgas para que me entrara toda, y yo apretando lo más que podía las nalgas y el culo, para que no le fuera fácil dejarme por otro, su goce era sacármela y meterla de nuevo ya que mi hoyo recuperaba su forma, estaba gozando ese apretón al entrar en mi, hábilmente puso sus dedos dentro de mi culo abierto, abriéndolo mas, para que a la hora de entrar soltarme y dejarla ir toda, ya más rápido y más hondo, restregándome el pubis en las nalgas, y sus huevotes chocando en mi entrepierna, uno de los que se había cogido el otro wey se acercó a manera de quitarlo de mi para que se lo cogiera, pero el don respondió de la misma forma que lo hizo el tipo antes, y sin dejar de cogerme, lo empujó de forma tranquila a un lado, ni modo, recibes lo que das y tras varios intentos, mejor se movió, alguien más que estaba a mi lado me acercó su verga, por instinto, no le correspondí, pero el don se la agarró con la mano, y lo llevó a mi boca, no sin antes decirle: "que te la mame, pero este culo es solo mio!!"

Y tal cual, y ya con permiso, se la mamé al otro cuate, y a otro más que estaba a mi lado, mientras el don ya estaba más prendido, y aunque me la estaba dejando ir ya más duro, estaba gozando con la vista de verme mamar vergas, me comenzó a nalguear rico, primero con una mano, luego con las dos, gozando el apretón que seguía al golpe, y aunque me dolían el culo y las nalgas, yo seguía moviéndome a su ritmo, empujándome hasta que me entrara toda de golpe, quejándome rico, gimiendo por su cogidón, hasta que le apliqué el moverme de arriba a abajo apoyado en mis rodillas y mis piernas tensas, cosa que lo dejó seguirme gozando todavía más, uno de los que estaban a mi lado estaba a punto de terminar, pero el don le pidió que esperara para terminar juntos, me la sacó de la boca y se contuvo, esperando, así que aproveché para mamar al del otro lado, y por consiguiente, llevarlo a punto de terminar, se recorrieron para que se la mamara a otro, y otro más, hasta tenerlos a punto, el don solo exclamó: "ya casi, van!!", y así recibí una primera venida en mi boca, mientras sentía ya más cabrón los empujones del don, que comenzó a venirse dentro de mi, la primera verga fuera y venga la otra, que también terminó, uno más que se pajeaba rico en mi espalda y otro más que esperó a que ordeñara al anterior para terminar también en mi boca y mejillas, el don ni siquiera me la sacó, hasta que se acercó el wey al que se la había mamado primero poniéndose un condón, pero el don, todo un cabrón, lo empujó a un lado, sin dejar que se acercara, mientras yo me sacaba la verga del don con las piernas flojas y el inevitable chorro de mecos escurriendo por mis piernas, el tipo ya no supo que hacer, así que se movió a un lado, el don esperó a que mirara bien, y sin dejarme levantar, lamió todo el semen que me había dejado en el culo, chupando mi culo adolorido y dejándome gozar su lengua de nuevo.

Cogí con el don cuatro veces, las cuatro en una posición diferente, una mejor que otra, me gozó hasta que se cansó, y para ser alguien maduro, el señor gozaba de una increíble condición física mientras a mi me temblaban peor las piernas después de cada metida de verga,escuchamos un nuevo comentario: "no mames, que rico coge el don!!" entre cada palo, nos íbamos al baño a limpiarnos, y ya hecho, nos regresábamos al cuarto obscuro para que me la siguiera metiendo una y otra y otra vez, no sin antes ir bateando a cada uno de los que lo habían bateado, tal como lo habían hecho ellos, y aunque yo pensé que fue su forma de vengarse, el cabrón me cogía cada vez más rico, como para demostrarles que era un maestro, y aunque me dejaba mamar a uno que otro, salia otro comentarío: "pinche gordito, la mama chingón!!" mientras se acercaba a mi oído para decir: "que rico culo tienes, pinche gordito!!", no dejó que nadie más me la metiera, esa noche, y por cinco largas y deliciosas horas, solo fui para el y el para mi.

Dicen que la basura de uno es el tesoro de otro, yo me encontré un cofre lleno de placer, y todos los que lo rechazaron, tuvieron su merecido, ver como me cogía, esa envidia de la mala por el tremendo pito que tenía, y la forma tan magistral en la que me cogió.

Después de las cogidas, nos tomamos unas cervezas mientras platicamos por un rato, de Guadalajara, casado, con hijos, y aún así, y después de otro palo, intercambiamos números para volver a vernos en el mismo sitio dentro de un mes, solo la pandemia nos ha impedido vernos, pero en cuanto esto pase, sé que de nuevo voy a ser solo de el, y si se portan bien, de alguno más, ya les contaré!!....

Enano Perverrrssso

Enero 2021