Fue como tantas otras veces en mi adorado Puerto Vallarta, me lo había pasado en la playa, comiendo y caminando en plan turista, esa noche me reuní para cenar con amigos que conocí en mis viajes anteriores, dejando al final el bar " Los amigos" para tomarnos unas margaritas tan deliciosas como brutales, me la pasé bien con ellos, pero como ya estaban a punto de cerrar, decidimos que hasta ahí se terminaba la noche, nos despedimos, después de declinar la oferta de llevarme al depa, ya iba medio jarra, y al ir caminando y reconocer las calles, recordé que el Spartacus estaba a unas cuadras, lo pensé un poco por la cantidad de drinks que traía encima, pero como a todos, el alcohol me pone jarioso, así que como no estaba tan lejos, me recorrí las calles de volada para llegar a mi paraíso.
Como tantas otras veces, me iba mentalizando a no tener tan altas expectativas, -después de las 11, lo que le caiga a la sopa es proteína- pensé burlonamente, abierto hasta el amanecer, mi lugar y el de muchos, bla-bla-bla, lo de siempre, entrada-privado-encuere-sin toalla esta vez- y muévelas gordito, que nos ganan el mandado!!
Apliqué la vieja maña de meterme al vapor para sudar un poco después de darme un regaderazo, quedé rechinando de limpio, ya con el boletito y la taquilla relucientes, me metí al vapor turco, y es el que está más obscuro en el fondo, para sudar un poquito la peda que traía, el vapor estaba bastante concurrido, solo que esta vez, había un poco más de personas nacionales, igual con grandes y pequeños atributos, pero todos en el afán de gozar la noche y las nalgas que les tocaran.
Me topó un oso alto, de bigote señorial y porte atractivo, me metí hasta el fondo, y me senté una de las bancas, el oso se metió también y se sentó junto a mí en la primera oportunidad, tomado un poco más que yo, eso sí, pero bien audaz aprovechando que yo me inclinaba para acercarme de forma nada sutil a los que iban entrando y me gustaban, si mordían el anzuelo ya chingué, pero el oso aprovechó eso para el pasar su brazo tras de mi espalda, y también para de una manera nada sutil, comenzar a acariciar lo que podía de nalga.
Estaba simpaticón, gordito y peludo, así que ya la llevaba de gane, lo dejé que se divirtiera y lo intentara, hasta que su segundo movimiento fue, voltear a mirarme, mientras se quitaba la toalla, se levantó quedando de frente a mi cara, poniéndome su verga parada tan cerca como pudo, buen tamaño, magnifico grosor, peludo como la chingada de todos lados, pero aun así, se la apliqué, no lo toqué y solo le sonreí, así que se sentó de nuevo, para seguir el jueguito de la mano y el dedo, que rozaba juguetonamente la raya del principio de mis nalgas, de nuevo me miró, ahora ya más directo, y solo tuvo que dirigir una mirada a su verga y pasar la lengua por sus labios, -venga, papá!!- la invitación perfecta para que yo solito me bajara.
Así que quien era yo para negarle un rato de pasión?, me agaché aún sentado a su lado, y me metí su verga sabrosa a la boca, mientras con una mano empujaba mi cara hacia abajo, con la otra me empezó a dar palmadas en la cadera y en lo que alcanzaba de mis nalgas, -un jugador al que le gusta rudito- pensé , así que le di lo que deseaba, recorriendo su verga de arriba a abajo con la lengua, mientras apretaba los labios, nuestros sudores haciendo una deliciosa mezcla de sal y alcohol, que bañaba su panza peluda y sabrosa, el señor estaba bastante bueno, subí mi mano a su pecho y apreté a gusto sus tetillas, le estaba encantando el juego, se dejó sin decir nada, solo respondió a esta última jugada con otras nalgadas más duras, me levanté, le abrí las piernas para meterme entre ellas, me puse de rodillas y seguí mamando, le lamí todo lo que pude, y lo que no también, mientras seguían pasando más tipos en busca de lo mismo que yo, algunos se habían quedado a ver, otros ya habían encontrado con quien, y se iban saliendo por lo fuerte del vapor, pero él se quedó, mientras yo seguía deleitándome con este señor, llegaron dos más para quedarse, uno, un tipo blanco, delgado de piernas largas que se sentó del lado derecho, y un chavo moreno, de mi altura, de cuerpo gordibueno pero macizo, de brazos grandes y lampiño, que se quedó del lado izquierdo.
Yo seguí chupando verga por un largo rato más, el Don me la sacaba de la boca y la sacudía rico en mi lengua, se la chaqueteaba con una mano mientras yo lamia sus huevos, los muslos, quejándose sabroso, para esto, ambos colados ya tenían abierta la toalla, mientras yo los tenía en la pendeja viéndome mamar, tras unas caricias en los hombros, haciéndose notar, el primero en dar el siguiente paso fue el flaco, que comenzó a acariciar el pecho del oso, que estaba feliz de recibir tanta atención, dándole un beso sabroso al flaco, yo seguía clavado mamando ese rico trozo, cuando comienzo a sentir los dedos del pie del chaval en mi trasero, o sea que este iba por el gran premio, sin hacerla de pedo, lo dejé que siguiera haciéndolo, el oso me detuvo por un momento, y me levantó para besarme, me dejé besar, sin soltar su verga, hasta que me hace voltear la cara para besar al flaco, y de volada, el flaco a besarme y el oso a acariciar mis nalgas y a besar mi pecho, el cabrón me devolvió unas mordidas deliciosas en el pecho, hasta que el flaco se pegó más a mí, para dejarme primero rozar su verga, larga y delgada, hasta que el oso tomó mi mano y me la puso en su verga, agachándose más para meterse la mía a la boca, el chaval seguía toda la acción sin anexarse, yo pensé hasta ese momento que solo iba a tener acción con estos dos, pero estaba bieeeeeeeeeeeeen pendejo!!
El wero besaba también muy rico, bastante golosito y fanático de morder cuello, siguió dándome a probar su boca y sus besotes ricos, hasta que el oso, que era quien llevaba la batuta de la acción, me jala para ponerme entre sus piernas, dándole la espalda, el flaco se jaló enseguida frente a mí, aprovechando para darme un último beso, mientras mi oso abría las piernas, y me colocaba justo arriba de su verga, le puso un poco de saliva, untando con ella la cabeza de su vergota, poniendo estratégicamente sus manos en mi cadera, lo que seguía?, que me pusiera unos sentones en su verga, y me valió ídem, me dejé caer con todo y hasta adentro ese manjar, abrió rico mi culo, y dolió aún más rico, estaba delicioso eso de abrir mis nalgas para sentir toda esa mata de pelos en mi culo, regalándoles una variedad de "ochos" y de "líneas" de adelante hacia atrás, restregándome el hoyo con tanto pelo, mientras el flaco frente a mí se chaqueteaba de lo lindo, esperando el momento justo para que se la mamara, que no tardó mucho en llegar, yo tenía la verga del oso clavada por completo, mientras me ayudaba de mis piernas y rodillas para bajar y subir despacio, mientras el flaco ya tenía atrapada una nueva boca para besar, pero sin dejar su lugar, se acercó en el momento justo en que me incliné más hacia el frente para ponerme su verga rica en la boca, me la metí por completo, dejándolo disfrutar mi boca ansiosa, ya el oso se iba levantando poco a poco, sin sacármela mientras me empinaba un poco más hacia la verga del flaco, hasta quedar empinado recibiendo vergas por culo y boca, ya otras manos acariciaban mi espalda, pero no eran las del chaval, eran las de un cuate moreno, alto y bigotón, de verga gruesa como la del oso, que se había acercado cuando el flaco se puso frente a mí, y que comenzaba a besar a mi oso mientras me azotaba su verga en la espalda, esa forma deliciosa de anunciar que también quieren ser parte de la fiesta.
Yo seguí en esta posición por un rato más, hasta que el osito se volvió a sentar, y por consiguiente yo con su verga en el culo, igual, sin sacármela, me puso las piernas sobre las suyas, ayudándome a treparme en él, sin dejar de subir y bajar, haciéndolo gozar y dirigiéndome con sus manazas en las nalgas a llevar el ritmo del metidón de verga que me estaba dando, mientras el flaco mamaba y se dejaba mamar por el anexado que se había encontrado, igual, sin quitarse de su lugar, se acercó más hacia mí, y aprovechando que estaba con las piernas bien abiertas sobre el oso, se puso justo en mi culo, al oso se prendió más, echándose lo más que podía hacia atrás, sujetándome con su brazo en el cuello, mientras el flaco hacía su primer intento por meterme la verga también.
Le costó uno, dos, tres intentos hasta que lo logró, deslizando poco a poco su verga también dentro, de mi boca salió un ay!! de dolor, que el bigotón grandote se ocupó de callar mientras me besaba, el oso me tenía por las piernas, y el flaco le ayudaba abriendo y dejando ir sus empujones ricos, me dolía como la chingada, pero lo estaba gozando de lo mejor, para este momento, ya teníamos público mirando, y aunque yo tenía la cabeza echada hacia atrás, pude ver al chaval que ya estaba de pie al lado derecho del flaco, chaqueteándose también, una verga también gruesa, de unos 18-20 centímetros, esperando su turno.
Y aunque pensé lo contrario, el flaco fue el primero en terminar, sin sacármela, el oso y yo dejamos que se viniera dentro, sintiendo sus mecos escurrir entre mis nalgas, sentí alivio cuando me lo sacó, seguía doliendo, pero estaba dispuesto a seguirle, pero el oso seguía muy caliente, dejando de besar mi cuello, le dice al bigotón, -vas!!-, este tuvo la gentileza de preguntarme -crees aguantar?- lo pensé un momento, y le dije que sí, así que sin dudarlo, va de nuevo este a mis piernas abiertas, me las abre lo más que podía, hasta que lo mete, pegándose hasta el full, y ahí voy de nuevo, abriendo mi culo para recibir las dos vergas, igual de grandes, y también gruesa, aunque más chica que la del flaco, mi pobre culo dolió, aún más que con el flaco, el bigotón esperó un momento, y la fue metiendo despacio, al oso ya se le había bajado la peda, y a mí también porque por el calor estábamos sudando cabrón!!, el wey que estaba besando al flaco, se para detrás del bigotón, lo besa, y ya con la verga parada, se lo comienza a fajar, yo no me imaginé que el grandote fuera de ida y vuelta, pero salí de mi error para ver, como en una pausa, se acomoda, me la deja ir, espera al tipo, y para el culo para que el otro tipo se la meta también, quedando un delicioso sándwich triple, el oso y el grandote aplicándome un glorioso dos romano, mientras el otro tipo se lo coge a gusto... y más rica la imagen , porque se la deja ir en chinga, duro y fuerte, y todavía más rico para mí el sentir las embestidas por partida triple, ante semejante bacanal, mi oso se comenzó a estremecer, mordiendo mi cuello y mi nuca mientras terminaba, yo sentía mis piernas temblar, adoloridos mis muslos por llevar el peso de mi cuerpo, pero aun así, me la dejó adentro hasta que el grandote también terminó, ambos sacaron de mi sus vergas, y el en el momento en que me bajé literalmente del oso, solo me dieron un tiempo corto de recuperarme, ya el chaval estaba detrás mío, esperando, y chingón, porque no se abalanzó a mis nalgas, me volteo y comenzó a besarme, despacio, rico, demostrándome que también él sabía besar, mientras el que se cogió al grandote se pone al lado mío, y me pregunta si le voy a dar chance, porque no terminó con el bigotón, miro al chaval, y solo me dice -vas!!-, y no me lo iba a decir dos veces, nunca le digo que no a una buena verga, así que me empino para que aquel me la meta, ya no hacen falta preámbulos, estoy dispuesto a aguantar y gozar, así que me dejo coger por este cuate, mientras mi chaval me alterna entre su boca y su verga, sujetándome por los brazos, dándome una caricia sabrosa de vez en cuando, acariciando mi cabello, mientras yo recibo verga con gusto y correspondo sus empujones haciéndome hacia atrás en cada arremetida, y aún tenemos público, unos que ya están cogiendo al lado mío, otros que intentan también un dos romano con un flaquito al fondo, eso ya se prendió a gusto, lo demás es disfrutar, pienso mientras miro de nuevo a mi gordibueno moreno, que sigue esperando su turno, que no tarda en llegar después de que el que me la estaba metiendo le dice - también le vas a dar?- el chaval ni responde, se pone su condón, y en el instante en que el que me coge se quita para que tome su turno...y cómo vas chaparrito!!, me hace levantarme un poco con el primer empujón, el que me acaba de coger, si querer quedarse fuera, ocupa su sitio en mi boca, mientras el gordi me sube una pierna a la banca, empinándose sobre mi espalda, abriendo mis nalgas con las manos para que me entre toda su cosota sabrosa, no soy tanto de gemir, soy fanático del gruñido, de saborear, de quejarme rico, y como tengo una verga en la boca, me es un poco más difícil, y aun así lo sigo haciendo, hasta que recibo en la mejilla la venida de este cabrón, que me toma por los cabellos, deteniendo mi cara para dejarme sus mecos en la cara, mientras lo espero con los ojos cerrados y la boca abierta, que aprovecha de nuevo para que me quede con sus últimas gotas de placer en la boca.
Solo quedamos el gordi y yo, los demás están ya en lo suyo, así que mi gordi aprovecha para acostarme en la banca, me abre las piernas, sujetando mis tobillos, me la deja ir sabroso, veo su cara llena de placer mientras también me observa, siento entrar y salir su verga deliciosa dentro de mí, mientras le comienzo a decir - así papito, métemela toda cabrón!!- el gordi primero se saca de onda, pero se conecta de inmediato y me sigue el juego, -así te gusta cabróncito? te gusta mi verga??- siiiii! -le respondo-, me encanta tu pinche verga enorme papá!!- -vas a querer que te coja otro más, putito?- porque te encanta que te la metan duro, verdad cabroncito?- -sí, quiero más verga, quiero que me cojan más!!- ante tremendo dialogo, fue inevitable recuperar la taquilla, ya de nuevo teníamos a cuatro cabrones a los lados, con el inconfundible juego de la chaqueta, esperando su turno, uno de ellos se subió a la banca, para sentarse en mi cara, yo enloquecido, lamí, besé y mordí sus huevos hasta que me mete la verga a la boca, ayudando al gordi a sujetar mis tobillos, mientras le mete más velocidad, pero ya nos cansamos, así que nos toma un momento recuperarnos para que de nuevo me la aplique mientras ahora me pongo en 4 en el piso, ya uno más se sienta frente a mí, el gordi lo espera, y le pregunta - te lo vas a coger?- -vas a dar chance? responde el otro- -a huevo, no sabes que culo!!- le dice por último, se pone en cuclillas mientras siento sus dedos con saliva lubricándome el culo, y va de nuevo, su verga gordita y sabrosa a entrar y salir, mientras sigue separando mi culo con sus dedos, con cada empujón, siento la verga en mi boca irse al fondo, y el cuate que recibe mi boca, recupera el diálogo puerco: te encanta recibir verga, verdad putito??, -si aprieta rico el gordito?- le pregunta al gordi, y este le responde -no mames, que rico se sienten sus pinches nalgotas- en eso escucho otra voz: - puedo?, -vas!!- autoriza el gordi mientras siento una palmada doble en las nalgas, solo me estremezco por el golpe, -dale más!!- dice el que estoy chupando- el otro obedece y me sigue nalgueando, el que mamo se va levantando para cogerme, mientras veo otra verga se acerca a mi boca, y escucho de nuevo al gordito preguntar -te lo vas a coger?- este le responde que no, así que mi gordo me voltea del otro lado, donde ya hay otra verga esperando, la misma pregunta - te lo quieres coger?, este responde que sí, así que me lleva a su verga que me meto a la boca, mientras mi gordi me la saca para darle el turno al que se la mamé sentado, el salivazo inicial como siempre y adentro!! ,mi gordi espera junto a mí, sin dejar de sacudírsela, mientras uno de los que miran se agacha para mamarlo, él lo deja, en lo que el tipo que me está cogiendo se acuesta boca arriba en la banca, dejando en alto su verga, me trepo a la banca y me monto sobre él, sintiendo rico y hasta el fondo su animal, él me toma de la cintura y me hace subir y bajar sobre su verga, y aunque tengo ya un dolor bastante cabrón en las rodillas, sigo moviéndome rico para no perder la costumbre, escucho una voz que dice - mira, pinche gordo resultó bien aguantador!!- y alguien que responde: en mis tiempos les decían putas!!, este último comentario,por lo menos a mí y a los demás nos vale pito, es su muy humilde opinión, así que seguimos cogiendo a gusto, alternando al gordi y a quien se quisiera unir pero que tuviera la aprobación de él, porque mi boca era en ese momento solo de su verga, unos cuantos más, y en un momento en que me tenía empinado el gordi, un chavalito un poco más gordito que yo, se sienta en el piso, bajo nuestras piernas y aprovechando la cogida, me la empieza a mamar, llevando su lengua de mi verga a mi hoyo que está siendo penetrado, esto nos estaba gustando cañón a ambos, y al darse cuenta este nuevo cabroncito, se levanta, para ponerse delante de mí, sube la pierna a la banca, se empina lo más que lo deja su pancita rica y se ensarta con mi verga, de nuevo un sándwich rico, unas nalgotas ricas y grandes, su hoyito húmedo y delicioso que no tuve que lubricar, no me importa si ya se lo cogieron, en este momento es mío, nuestro, el gordito se adapta de volada al momento en que el gordi me la saca mientras yo se la meto a el más y más duro, se deja coger delicioso, recibe sin protestar las nalgadas que le doy, bastante sabrosito el gordito, lo jalo de los cabellos, jalándolo hacia atrás, mientras escuchamos sus quejidos, hasta con eso, el cabróncito se queja rico y gime de lo lindo, así que le pido que se acueste en la banca, me pongo sus piernotas ricas en los hombros para seguir metiéndosela sin piedad, gozando la delicia de sentir una verga en mi culo y el calor del suyo, mi gordi me pide que le dé chance, y es ahora el que se lo coge, mientras yo me pongo al lado de su cara para que me la mame, me recuerda a mi hace un rato, y me gusta, me prende más encontrar otro árbol del mismo bosque, que nos goza y lo disfruta, se deja hacer y coger, lo penetramos una y otra y otra vez, nos alternamos su culo y su boca el gordi y yo, repitiendo la dosis de estar yo en medio que tanto disfruto, hasta que ya me era inevitable terminar, así que lo comienzo a masturbar, para terminar juntos, sintiendo que mi gordi empuja más y más fuerte, yo hago lo mismo, hasta que terminamos los tres, primero el gordi, yo enseguida y el gordito al final, se viene aventando un chorrazo de mecos que me salpica y llega hasta su cara.
Nos quedamos sin zafarnos, el gordi recostado en mi espalda, yo empinado sobre el gordito, dándonos un último beso.
Al salir, después de bañarme, subí a la terraza, pedí una cerveza y me metí a la alberca, para fumarme un cigarro, en eso llegó el gordi, se mete también a la alberca y se dirige hacia mí, -Ernesto- me dice extendiendo su mano, me río, y le digo -que no era al revés?- se ríe también y se queda platicando conmigo, resulta que me había echado el ojo desde "Los Amigos", pero yo jamás lo noté, - te gustó?- me pregunta, -!Claro!, le respondo, -me gustaste un chingo- confiesa, y pensé que con el oso te ibas a conformar, pero eres bien " entroncito", -putito- lo corrijo, -no- responde rápidamente, me gusta que sepan lo que hacen, si les gusta el pito y lo gozan tanto, porque limitarse? por qué viene con sus cuates?, no, dicen que cada quien cuenta según le va en la feria, y hay tipos que solo vienen a ver quién les dispara la peda, tu sabes a lo que vienes, lo disfrutas, lo vives chido, por lo menos yo te disfruté muchísimo, y creo que todos te gozaron, todo lo que vi y lo que te hice me gustó, nomás que para la próxima te voy a pedir una cosa- dime- respondo, -que me la metas también- -OK!!!- le digo, pero ya me voy mañana, -no importa- para la próxima vez que vengas, me lo prometes?...- ok, -Carlos- le respondo y le extiendo la mano, me jala hacia él y me regala los últimos besos de la noche.
Así que solo espero poder asistir a mi cita este año con mi bombón gordibueno.
Ya les contaré.
Enano Perverrrssso
Mayo 2020
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